El papa no recibirá a más políticos hasta después de las elecciones

La noticia debe haberle caído mal a más de un potencial candidato para las próximas elecciones. El papa Francisco avisó que no recibirá a más políticos argentinos hasta después de las legislativas de octubre, o al menos así se lo trasmitió a la canciller Susana Malcorra, en un encuentro que mantuvieron ayer en el Vaticano.

“Hablamos del hecho de que tenemos un año electoral por delante y, en ese contexto, me dijo que, siendo yo la canciller, era la última persona que recibía hasta que pasaran las elecciones”, dijo Malcorra tras la reunión. No hubo fotos.

La canciller aclaró que quiso “poner fin a las especulaciones” sobre una nueva visita del presidente Mauricio Macri al Vaticano antes de las elecciones, y aseguró que “nunca estuvo planeado”: “Aparte de que no estaba en los planes, Su Santidad fue claro en decir que se mantendrá prescindente y muy al margen de todo este proceso y que, de acá hasta pasadas las elecciones, no va a tener ninguna visita oficial”, insistió.

No es la primera vez que el papa advierte que no recibirá más dirigentes durante una campaña argentina. En marzo de 2015, año de la elección presidencial, el oficial de protocolo del Vaticano, Guillermo Karcher, realizó exactamente el mismo anuncio. En ese entonces, Karcher afirmó que Francisco estaba molesto con la utilización política que dirigentes argentinos hacían de sus visitas al Vaticano. Pese al anuncio, en junio, Cristina Kirchner se reunió –por quinta vez– con el papa. Dos meses más tarde, se celebraron las PASO.

“¡Habemus papam!”. Desde su inesperado nombramiento el 13 de marzo de 2013 , más de un político intentó “colgarse de la sotana” del nuevo Pontífice. Algunos que lo habían criticado con dureza durante sus años como cardenal Bergoglio, acusándolo incluso de genocida, al hábito del papa más bien le hicieron una toma de judo.

De Cambiemos al kirchnerismo, casi no hay político argentino que no tenga una foto con el papa, exceptuando a los dirigentes de la Izquierda. Entre las más evidentes se destaca la de Martín Insaurralde, candidato a diputado del FpV en 2013, días antes de las elecciones de agosto. Insaurralde acompañó especialmente a CFK para tener su foto. Inmediatamente, la imagen se pudo ver en pancartas en las calles bonaerenses.

Sobre la supuesta mala relación con el nuevo presidente, hubo rumores desde el día que Macri asumió. El papa no saludó ni mandó felicitaciones. La tensión creció luego cuando, Scholas Occurrentes, fundación pontificia, rechazó los 16 millones de pesos que el gobierno había decidido donarle. Luego Francisco no sonrió en la foto con el mandatario. También, le envió un rosario bendecido a Milagro Sala. El Pontífice tenía planeado venir en 2016, pero lo descartó, y lo mismo con 2017 y 2018. El 2019 es año electoral y difícilmente elegiría volver. Eso sí, el día que regrese al país, será una buena foto para el presidente de entonces.