Macri apura el trámite y ya mandó al Congreso el paquete de reformas

Esta semana podría empezar el debate en las comisiones. Pero se prevé que recién serán votados con la nueva composición de las Cámaras.

Ayer de madrugada, ingresaron finalmente al Congreso el proyecto de ley de Reforma Laboral que acordaron esta semana el gobierno y la Confederación General del Trabajo (CGT), y el pacto fiscal y reforma previsional que Nación cerró con los gobernadores de todas las provincias: empezará su debate en comisiones. Mientras, comienza esta misma semana el tratamiento de una catarata de proyectos en el recinto. Las reformas se terminarán de sancionar en sesiones extraordinarias en diciembre, con la nueva composición en las cámaras.

El proyecto de reforma laboral, ingresó al Senado el sábado a la 1:01, mediante expediente electrónico. Su ingreso formal ocurrirá el martes y comenzará a ser tratado esa misma semana en la Comisión de Trabajo y Previsión de la Cámara alta. La iniciativa, que cuenta con 130 artículos, pretende “la formalización del empleo, la baja de la litigiosidad, generar empleos, aumentar la productividad, proteger a las poblaciones vulnerables y mejorar la formación continua”. El proyecto propone una condonación de deuda para aquellos empleadores que regularicen la situación de sus trabajadores, quienes podrán contabilizar hasta cinco años de aportes para su jubilación.

Después de semanas de negociación y de cruces, entre el martes y el miércoles, la CGT y el Ministerio de Trabajo terminaron de legar a un acuerdo para enviar un proyecto de reforma al Congreso. El entendimiento con el gobierno volvió a visibilizar la interna que vive la CGT desde su unificación entre lo sectores más dialoguistas y más intransigentes. El líder del sindicato de Camioneros, Pablo Moyano, ya advirtió, un día después, que el movimiento obrero no aceptará la reforma.

Para llegar al acuerdo, el gobierno debió hacer algunas concesiones: eliminó artículos que modificaban las compensaciones por horas extra y feriados trabajados y que igualaban los derechos y obligaciones del empleador y trabajador, y reformuló de otros.

En pos de reducir la litigiosidad, se buscó ordenar normativamente la situación de trabajadores de empresas que prestan servicios en otras empresas. Se clarifican las obligaciones que los contratistas deben cumplir para garantizar el cumplimiento de los controles de tercerización: se debe solicitar el CUIL de los trabajadores subcontratados y el control de la constancia de pago de las remuneraciones y los aportes a la seguridad social.

Se preservó, como reclamó la CGT, la protección de los trabajadores frente a “cambios irrazonables en el contrato de trabajo evitando la posibilidad de abusos de la normativa”. En cuanto al cálculo de las indemnizaciones, se continuará considerando para ello, no solo el salario y el promedio de las horas extras corrientes, sino también el proporcional mensual del aguinaldo y el premio anual, cuando sean de práctica habitual de la empresa. Entre otros puntos, se garantiza también la validez de las modificaciones de contratos celebrados entre empleador y trabajador mediante la homologación con asistencia sindical o letrada. Y se prohibe el carácter no remunerativo a conceptos, o sumas de naturaleza salarial, salvo los expresamente habilitados por ley.

La intención del gobierno es comenzar a debatir el proyecto la semana que viene con la presencia del ministro de Trabajo, Jorge Triaca, y de representantes de las centrales gremiales. En acuerdo con Miguel Pichetto, la iniciativa entró por el Senado.

La llegada al Congreso del proyecto laboral abre un nuevo escenario con peligros para las pretensiones de unificación del ala peronista no K. En Diputados, desde el Frente Renovador de Sergio Massa ya advierten que están preparados para levantar la mano en contra. Creen que es una reforma a medida de los empresarios, que aprovecharán los beneficios de la nueva ley sin blanquear trabajadores no registrados. Esa posición acercaría al massismo más al FpV que al resto del PJ. Pero falta, la ley recién se tratará en extraordinarias, luego del 10 de diciembre.

Un fin de año cargado

en las Cámaras

“Mantiene el núcleo de los derechos de la Ley de Contrato de Trabajo. Al fin y al cabo es una reforma, no a la ‘brasileña’, pero una reforma”.

Juan Carlos Schmid

Secretario general

de la CGT

Datos

Se viene un fin de año cargado. El oficialismo de la Cámara de Diputados aspira a sancionar en las próximas dos semanas, antes del fin del período ordinario (30 de noviembre), un paquete de temas entre los que se encuentran: el proyecto de Compre Argentino para que las pymes tengan prioridad en las compras del Estado;la reforma de la ley de Mercado de Capitales, con incentivo para el financiamiento de las pymes; la reforma de la ley de Defensa de la Competencia para combatir las prácticas monopólicas de abuso de posición dominante; el proyecto de fomento de la Industria Naval y la Marina Mercante, y la creación de un registro público de violadores. Para las extraordinarias de fin de año queda el Presupuesto 2018, la reforma tributaria, ya en Diputados, sumado a reforma laboral y previsional que ingresaron por el Senado.
“Mantiene el núcleo de los derechos de la Ley de Contrato de Trabajo. Al fin y al cabo es una reforma, no a la ‘brasileña’, pero una reforma”.

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