Sturzenegger y Prat Gay, otra vez divididos por la inflación

El ministro de Hacienda, Alfonso Prat Gay, y el presidente del Banco Central, Federico Sturzenegger, volvieron a mostrar discrepancias sobre cómo encarar la recuperación económica: mientras el ministro festejó que el gobierno logró frenar la inflación, que “ya no es un tema”, Sturzenegger lo contradijo y aseguró que su desaceleración “no provee los elementos suficientes para concluir que sea conveniente relajar la política monetaria”.

El lunes, Prat Gay aseguró estar “tranquilo” por cómo marcha la economía y ratificó que “en agosto vamos a ver un índice de inflación que va a estar cerca del 1 por ciento aún sin contar la rebaja de tarifas”, el cual, destacó, “será el índice más bajo en 10 años”. El ministro admitió por radio que la inflación anual “todavía está alta, por supuesto” pero aseguró que “no va a ser del 45 por ciento, ni aún en los distritos con mayor impacto de tarifas”.

Sólo un día mas tarde, al disertar en un Simposio Internacional de Economía, organizado por la Universidad de Tel Aviv, Sturzenegger lo contradijo. Si bien coincidió con el ministro en que “agosto mostrará una significativa desaceleración de la inflación” y aseguró que las “expectativas de inflación para el año 2017 todavía se ubican por encima de las expectativas originales”, advirtió que ello “no provee los elementos suficientes para que pueda concluirse que sea conveniente relajar la política monetaria”.

Hacienda y el Banco Central vienen mostrando posiciones diferentes respecto de las políticas a llevar para bajar la inflación. Desde el Ministerio pretenden una baja más pronunciada de la tasa de interés de referencia, que no debería superar el 24%. El BCRA dispuso ayer una pequeña baja de medio punto porcentual en su tasa de política monetaria, tomada de la letra a 35 días, que quedó en un nivel del 28,25% anual.

Por su parte, desde la autoridad monetaria cuestionan el elevado déficit fiscal, pero el ministro no confía en el humor social para decidir ajustarlo más.

“Una reducción de la inflación en un mes puntual no es indicador suficiente sobre una reducción sostenida. Un proceso de desinflación persistente necesita de varios meses para consolidarse como tal”, dijo ayer el titular del BCRA, y destacó: “El camino a recorrer hasta alcanzar el objetivo de una inflación del 5% anual se encuentra todavía lejano”.

Sturzenegger ratificó además que “el Banco Central va a mantener la tasa real de interés positiva, con un sesgo antiinflacionario hasta que el objetivo final sea alcanzado. Lo cual requiere, desde ya, que a medida que la inflación y las expectativas inflacionarias vayan bajando, la tasa nominal de interés se vaya reduciendo”. Sin embargo, hacia el final de su discurso, afirmó que “no ve el gradualismo fiscal con preocupación”.

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