La trama política detrás de la pelea por conducir la CEB

Dirigentes de las distintas fuerzas se involucran en las elecciones para renovar en forma parcial el Consejo de Administración de la Cooperativa de Electricidad Bariloche.

El anuncio de un nuevo proceso electoral para renovar parcialmente el Consejo de Administración de la Cooperativa de Electricidad Bariloche (CEB) reactivó la disputa por el control de una empresa emblemática de Bariloche.

“La Cooperativa excluirá de todos sus actos las cuestiones políticas, religiosas, sindicales, de nacionalidad, regiones o razas determinadas”, dice el artículo 4 del Estatuto vigente de la CEB. Ningún sector admite que detrás de la puja electoral hay actores políticos interesados.

“El asunto de la política no toca para nada la cooperativa, no se mete para nada. Tenemos gran vínculo con la provincia, con la municipalidad y ahora con sectores del gobierno nacional”, aseguró el presidente de la CEB, el abogado Rodolfo Rodrigo. Pero los hechos reflejan un escenario marcado por la política.

La Lista Roja quiere extender su hegemonía sobre la CEB, que controla desde finales de 2002 cuando desplazó a la Lista Blanca, que lideraba el entonces dirigente del MUP Leonardo De Ferraris.

En la Lista Roja conviven dirigentes del peronismo, del radicalismo que responden al exdiputado nacional Hugo Castañón y está el Sindicato de Comercio, cuyo líder es Walter Cortés, que está preso cumpliendo una condena de 4 años de prisión como coautor del delito de fraude en perjuicio de la administración pública.

Rodrigo quiere renovar por otro período. No es el único. Los otros integrantes del Consejo de Administración que van por otro mandato son los dirigentes del gremio de Comercio Dana Guzmán y Carlos Criado y Jorge Perella.

Invicto

La opositora Lista Naranja-Amarilla intentará derrotar al oficialismo, que nunca perdió una elección hasta ahora. En ese sector hay dirigentes del radicalismo, del FpV, del massismo, del Pro, y de la Mesa Sindical, que está alineada con el gobernador Alberto Weretilneck.

Rodrigo conduce el partido vecinal Todos Por Bariloche, que se sumó en enero pasado al proyecto de Weretilneck.

Ninguno de los sectores, que competirán en las urnas, reconoce públicamente que tiene el apoyo del gobernador. Pero en voz baja especulan que Weretilneck pondrá supuestamente “huevos en las dos canastas”.

El dirigente de los peones de Taxis Luis Barrales y el exfuncionario del exintendente radical Marcelo Cascón, Carlos Aristegui son los rostros visibles de la Lista Naranja-Amarilla.

En cambio es una incógnita si el intendente Gustavo Gennuso tiene afinidad por alguno de los sectores en pugna por la CEB.

La elección fue convocada para el 19 de noviembre. Se elegirán 94 delegados titulares y 39 suplentes. Se disputan cuatro puestos titulares y cinco suplentes en el estratégico Consejo de Administración y tres síndicos titulares y tres suplentes. Habrá unos 33.000 asociados de Bariloche y Dina Huapi habilitados para votar en los 23 circuitos.

Lo que mueve la CEB

Acceder a la cúpula de la CEB ha desvelado a dirigentes políticos, gremiales y vecinalistas. No es para menos. Se trata de una de las empresas más fuertes de la ciudad. Tiene un movimiento financiero que asombra.

La facturación mensual, promedio, está en el orden de los 53 millones de pesos. Es decir que anualmente supera los 600 millones de pesos, según los datos oficiales que informó el gerente general de la CEB Federico Lutz. Aunque explicó que un 24,65 por ciento de los fondos recaudados corresponde al servicio de cobranzas a cuenta de terceros.

La masa de recursos que la CEB mueve mensualmente supera la recaudación municipal por tasas, que en junio y julio pasado alcanzó los 37,3 y 39,6 millones de pesos respectivamente.

El presupuesto de la CEB aprobado la semana pasada para el ejercicio que va desde el 1 de julio de 2016 hasta el 30 de junio 2017 asciende a 612 millones de pesos. El municipio estima recaudar este año 702 millones de pesos por ingresos propios.

Lutz aseguró que la situación financiera de la empresa es equilibrada. Pero el déficit es operativo. “Necesitamos comprar diez vehículos y estamos comprando cinco”, detalló para explicar el déficit operativo. “Aproximadamente necesitamos cinco millones por mes”, estimó.

Brazo social

Además, la CEB recibió desde febrero de 2013 hasta finales del año pasado 18,5 millones de pesos por tres programas del Plan Argentina Trabaja de Nación, que destinó a proyectos productivos que emplearon a 260 personas de 11 cooperativas. Guzmán ejerció la coordinación de esos proyectos. El Inaes giró los fondos. Lutz aseguró que llevan rendidos el 85 por ciento de los fondos recibidos.

Dijo que el gobierno de Mauricio Macri le quitó el manejo de esos recursos al Inaes. Ahora dependen del Ministerio de Desarrollo Social, que conduce Carolina Stanley. También cambió el nombre del programa. Informó que desde Nación enviaron este año 5,5 millones de pesos para el nuevo programa destinado a 180 personas.

Además, la CEB tiene fuerte presencia territorial. Asigna aportes económicos a clubes, entidades sociales y apoya eventos y actividades sociales.

Esa fuerte presencia social de la CEB representa una vidriera pública clave. La CEB sirvió de plataforma política a varios dirigentes.

De Ferraris se postuló a intendente en 1995 por el Movimiento de Unidad y Participación (MUP) que germinó desde la conducción de la CEB. Salió tercero con algo menos del 20 por ciento de los votos. Pero logró dos bancas en el Concejo Municipal.

Casos emblemáticos

El exintendente Alberto Icare se desempeñó varios años como responsable del área social de la CEB. Icare fue electo concejal, junto con Graciela Di Biase, en 1999 cuando el MUP hizo alianza con la UCR. Después, Di Biase fue intendenta interina.

Desde la CEB apoyaron a Icare cuando ganó la Intendencia por primera vez en mayo de 2002. Otro caso emblemático fue el de Omar Goye que desde la presidencia de la CEB se catapultó como candidato a intendente.

Goye ganó la elección en octubre de 2011, con el apoyo del PJ, del FpV, del PVC y del Partido Todos Por Bariloche de Rodrigo. Goye llevó a María Eugenia Martini como candidata a presidir el Consejo Municipal.

Sin embargo, la disputa por el control de la CEB , que tiene 49.807 asociados, no despierta demasiado interés en la población de Bariloche y Dina Huapi. Los datos reflejan que sólo la elección de 2002 movilizó aproximadamente al 18 por ciento del padrón de asociados. Después, en las elecciones sucesivas ni siquiera se acercó al 10 por ciento la participación.

Acceder a la cúpula de la CEB es algo que ha desvelado a dirigentes políticos, gremiales y vecinalistas: es una de las empresas más fuertes de la ciudad.

Datos

Acceder a la cúpula de la CEB es algo que ha desvelado a dirigentes políticos, gremiales y vecinalistas: es una de las empresas más fuertes de la ciudad.

Formá parte de nuestra comunidad de lectores

Más de un siglo comprometidos con nuestra comunidad. Elegí la mejor información, análisis y entretenimiento, desde la Patagonia para todo el país.

Quiero mi suscripción

Comentarios