Sin definiciones por el futuro de los trabajadores del Enacom

Sin definiciones por el futuro de los trabajadores del Enacom

Dos altos funcionarios del Ente Nacional de Comunicaciones, que llegaron hoy desde Buenos Aires, confirmaron el cierre de la delegación local y mantuvieron una tensa reunión con el personal, que no logró garantías sobre su continuidad laboral.

El director de Delegaciones y Atención al Usuario del organismo, Diego Montanaro, y la referente de Recursos Humanos, Jimena Artigas, encabezaron el encuentro con los trabajadores y con representantes de los gremios ATE y UPCN, al que impidieron el acceso de la prensa.

La única precisión que dejaron es la confirmación del pase de una empleada a la delegación Enacom Neuquén (que ella había solicitado tiempo atrás) y también expresaron compromisos para encontrar destino al resto de los trabajadores en otras agencias estatales de Bariloche.

Sin embargo, los funcionarios se abstuvieron de ratificarlo por escrito en el acta confeccionada al cabo de la reunión y sólo dijeron que las alternativas serán evaluadas en Buenos Aires.

A pesar de los reclamos, tampoco entregaron documento alguno que ratifique el cierre, comunicado hasta ahora de palabra.

Algunos participantes aseguraron que en la reunión hubo cuestionamientos duros y “momentos de tensión”.

Los trabajadores y los gremios acordaron “resistir el cierre” y podrían llamar a una medida de fuerza de alcance nacional.

En el Enacom de Bariloche trabajan 11 personas, pero sólo una es “de planta”. El resto se desempeña con contrataciones precarias, iniciadas durante el gobierno anterior.

Según la información disponible, la oficina local del Enacom permanecería abierta durante 90 días, hasta completar su liquidación. El actual delegado, Hernán Sportiuk, admitió que se trata de una “decisión política”. Señaló que “en la mayoría de las provincias el Enacom tiene una sola oficina”, por lo general en la ciudad capital.

En Río Negro los trámites se concentrarían de ahora en más en la sede de Viedma.