Solidaridad, de la escuela a la comunidad

Un proyecto social salido de un aula que cambia la realidad de una parte de la comunidad. Eso fue lo que hicieron un grupo de estudiantes de la escuela secundaria 44, ubicada en Elordi y 2 de Agosto. La idea , además de beneficiar a los vecinos, tuvo un reconocimiento para los gestores: resultó finalista para el premio presidencial Escuelas Solidarias que se definirá del 23 al 25 de octubre en Buenos Aires.

El trabajo de los estudiantes de quinto año del colegio “Abuelas de Plaza de Mayo” fue preseleccionado junto a otras 10 escuelas, entre 2.000 propuestas que se recibieron en la edición de este año.

Daniel Fuentes fue uno de los docentes que coordinó el proyecto que comenzó el año pasado y se prolongó al 2017.

“Lo que se aprende en la escuela se pone a disposición de la comunidad. Se busca una acción concreta sostenida en el tiempo y la gestión de recursos con las ONG, juntas vecinales y organismos estatales. En este caso, es un proyecto sobre ciudadanía juvenil, con impacto social”.

La tarea se trasladó al barrio Pilar I, donde se acondicionó el Salón de Usos Múltiples, con trabajos de pintura, jardinería, revoque y colocación de cerámicos y arreglo del baño.

“Elegimos esta sala porque no funcionaba a pleno. Los chicos se dieron cuenta de que mejorando los baños, se podía ampliar la capacidad de atención de la sala. Trabajaban fuera del horario escolar, incluso los sábados a la mañana. Ahora, más allá de la sala de salud, el SUM se usa para yoga para los adultos mayores y reuniones. Los pibes valoran las mejoras y el impacto que ha tenido”, indicó el docente de nivel medio.

Este año, el proyecto continúa en el barrio Pilar II con otros 6 estudiantes que arreglan y pintan la sala de salud. “Lo importante son las redes que se generaron con el Caat, por ejemplo, que empieza a planificar con los pibes”, añadió.

Dos veces reconocida

La escuela ya tiene antecedentes en este premio presidencial. En el 2013, el entonces ministro de Educación de Nación, Alberto Sileoni, entregó este galardón a la escuela por el proyecto “Memoria de la comunidad. La reconstrucción del pasado colectivo, el valor de la identidad y la historia antihegemónica”.

Dos años después, llegó el segundo reconocimiento para el colegio, esta vez, con el proyecto “Reserva del cerro Carbón” que incluso terminó aprobándose como ordenanza.

En el caso del último proyecto, se realizó una evaluación. “El grupo rescató que había aprendido a consensuar, a hacer política en el sentido real de la palabra”, sintetizó el profesor.

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