Trabajos comunitarios para la mujer que atropelló a Gustavo

El juez Campana suspendió el juicio a prueba por el delito de lesiones culposas. María Prafil tendrá que pagar 100 mil pesos como “contribución económica”.

Trabajos comunitarios para la mujer que atropelló a Gustavo

Ruth Rivera no pudo contenerse y salió en busca de Miriam Prafil, que se retiraba de la sala de audiencias tras haber sido beneficiada con la suspensión de juicio a prueba durante 18 meses por un acuerdo entre la fiscal Silvia Paolini y la defensa. Prafil manejaba el Citroen C3 que atropelló el 13 de diciembre pasado a Gustavo, cuando caminaba hacia la escuela. El niño sufrió graves lesiones y aún lucha por recuperarse. “¡Casi mataste a mi hijo!”, le gritó, furiosa, Rivera a Prafil, que descendía las escaleras del segundo piso del edificio de Tribunales. Mientras, los familiares del niño se trenzaron a los gritos con una mujer, que acompañaba a la imputada y que denunció que le habían golpeado.

Ruth y su esposo Gustavo no podían creer lo que había ocurrido. Miraban desconcertados por la impotencia.

La fiscal había formulado cargos el martes a Prafil por el delito de lesiones culposas agravadas. No incluyó el exceso de velocidad como agravante ni que manejaba sin seguro. En esa audiencia, la defensa propuso el beneficio de la suspensión de juicio a prueba para Prafil. La fiscalía no planteó ninguna objeción.

La fiscal aceptó la oferta de la defensa, que ofreció pagar 100 mil pesos a modo de resarcimiento (un pago de 30 mil y 7 cuotas de 10 mil pesos). También, Prafil se comprometió a cumplir 80 horas comunitarias y un curso de manejo.

La abogada por la querella María Rodrigo objetó el pedido de suspensión de juicio a prueba y pidió al juez Bernardo Campana suspender la audiencia. Pero no impugnó la formulación de los cargos que la fiscal atribuyó a la acusada.

La audiencia se reanudó este mediodía y el abogado por la querella Rodolfo Rodrigo criticó a la fiscal por no tomar en cuenta a la querella. “No estamos contentos con la calificación -advirtió Rodrigo.- Es una persona que avanza a más de sesenta kilómetros por hora, que no tiene seguro y atropella a un niño y lo deja abandonado”. Y cuestionó el planteo de la suspensión de juicio a prueba.

La mujer embistió al niño en la calle Rolando, casi 25 de Mayo. El chico tenía 12 años y se dirigía con su hermana a la Escuela 273. Era su último día de clase porque egresaba de séptimo grado. Como consecuencia de las graves lesiones que sufrió quedó con secuelas importantes.

Campana sostuvo que el pedido de la fiscalía estaba “debidamente fundamentado”. “No me puedo apartar de la ley”, afirmó el juez. Recordó que el delito atribuido a Prafil tiene como pena máxima 3 años de prisión y el máximo de inhabilitación para conducir es 18 meses.

Señaló que si Prafil cumple las pautas de conducta y paga el resarcimiento comprometido quedará sobreseída. Si no cumple, será sometida a un juicio por el delito de lesiones culposas gravísimas.

“No podemos consentir esta ilegalidad”, denunció Rodrigo y aseguró que no iban a aceptar ninguna compensación económica. Los padres del niño estaban desconcertados. Y cuando Campana dio por finalizada la audiencia, los ánimos explotaron. Los padres del niño se marcharon de Tribunales masticando dolor e impotencia.

El caso


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