“Compartamos nuestros alimentos”

Todos los seres vivos necesitamos comer. La comida nos proporciona la energía que contiene y una vez metabolizada en nuestros órganos nos da la fuerza para pensar, sentir y actuar con agilidad, salud y prestancia.

Comemos cuando tenemos hambre, cuando el plato nos agrada y a veces para calmar nuestros nervios y ansiedades.

Podemos comer de más y engordamos o podemos manejar una dieta magra y perder peso, debilitarnos y enfermar.

Nuestra dieta debe ser equilibrada y contener todos los elementos alimenticios y vitamínicos que nuestro cuerpo necesita para funcionar de forma óptima sin que ninguna substancia le falte, sin excesos.

Las comidas tienen sabores variados y atractivos, las diferentes combinaciones de ingredientes y formas de cocción nos permiten disfrutar del acto de comer cuando estamos sanos, ayudarnos a reponernos cuando estamos enfermos y compartir el momento con otros sentándonos juntos a la mesa.

La comida es una grande y necesaria bendición que lamentablemente muchos no pueden gozar y aprovechar.

El hambre es un flagelo cruel que azota a un tercio de la humanidad, que pesa sobre nuestra conciencia e impulsa a muchos a poner parte de sus bienes y servicios en manos de los más necesitados proporcionándoles una dieta simple pero saludable y vital, especialmente a los niños.

En la Tierra somos muchos pero en la vida todos somos uno, y es mejor dar que recibir. Compartamos nuestro tiempo, bienes y alimentos con mansedumbre y humildad si tenemos la posibilidad, no solo con los que pueden retribuirnos sino con los que tienen urgente necesidad.

Coma y pásela bien, pero no se aleje de las organizaciones que llevan alimento a los hambrientos.

Alberto Félix Suertegaray

DNI 14.169.481

“La comida es una grande y necesaria bendición que lamentablemente muchos no pueden gozar y aprovechar. El hambre es un flagelo cruel”.

Alberto Félix Suertegaray