Hoy pocos preguntan
Nadie nunca supo, como se debiera, cuando se cayó, del cielo a la tierra.
Algunos dijeron, fue un mal entendido, fue ese corazón, que un día dolido, perdido en su celo, se cayó del cielo sin ningún sentido.
Otros afirmaron, que un hombre asustado, dejó su razón cuando en el dolor, buscó aquél atajo.
Hoy pocos preguntan, un suelo caliente, los que más recuerdan, son los que más pierden, lo expulsa este mundo, lo patea fuerte, hacia algún rincón, donde no moleste.
No hay más preguntas, y el hombre obedece, sintiendo la culpa, en todo esto andado, de no haber mirado, de frente y sin miedo, a un cielo callado, que asume sintiendo.
Roberto Savasta
DNI 14.251.572
Otros afirmaron, que un hombre asustado, dejó su razón cuando en el dolor, buscó aquél atajo.
Datos
- Otros afirmaron, que un hombre asustado, dejó su razón cuando en el dolor, buscó aquél atajo.
Comentarios