“La ‘primavera silenciosa’ está llegando”

En los sesenta, época de estudiante universitario, tratándose de bibliografía obligatoria o no, tuve oportunidad de leer “La primavera silenciosa”, una historia que me impactó profundamente e incorporó en mí la preocupación por la naturaleza y el medio ambiente. No hablábamos de ecología como ciencia, pero mediante el urbanismo y el planeamiento comenzamos a preocuparnos por el tema.

Fuimos estudiando, conociendo y aplicando criterios que luego fueron ecológicos y medio ambientalistas, que he tratado de llevar adelante en mi profesión y participación pública durante años.

Muy pocas veces he logrado ser escuchado o que mis ideas y proyectos fueran continuados por los que me sucedieron, hasta su culminación.

Es por eso que tras haber leído algunas cartas de lectores, de algunos profesionales involucrados en la temática, especialmente de San Antonio Oeste y Neuquén, con proyectos para Las Grutas y propuestas para el mejoramiento del medio ambiente y el rehuso del agua resultante del tratamiento de efluentes cloacales, pretendo desde estas líneas darles todo mi apoyo y reconocer vuestra preocupación por brindar soluciones.

Desde hace más de 20 años propuse, inicié y traté de llevar adelante proyectos de este tipo, que por supuesto fueron abandonados, como la propuesta en Eco Río, seleccionada como una de las 100 mejores del proyecto mundial “Nuestras propias soluciones”, que integra una publicación mundial en reconocimiento. Este proyecto lo realizaron para Cipolletti profesionales de esa ciudad, equipo del que formó parte el ingeniero Victorino Caldiero; fue apoyado por el DPA desde su delegación de General Roca, con profesionales que tuvieron activa participación en el mismo, y fue monitoreado y auspiciado por la Universidad del Comahue.

Todo lo que se está y se ha estado trabajando y proponiendo, como proyecto o realizaciones, aunque sean pocos, sirve; aunque a los que son hoy responsables no les interese o no les convenga para sus proyectos. Por eso la nota de Hugo Chafrat, “A propósito del Día de la Tierra”, encierra una gran verdad.

Tienen sentido porque a todos aquellos que festejan el día plantando un árbol para la foto al día siguiente nadie va a tener oportunidad de sacarles una foto regándolo.

Por eso lo de la “primavera silenciosa”. Por eso cuando nuestros hijos regresen de sus estudios o trabajos van a extrañar el verde, el agua pura, el sonido de los pájaros y muchas otras cosas que dejaron, que sólo recordarán del día que se fueron.

Esta “primavera silenciosa” llegó al Primer Mundo al principio de la década del sesenta. No hace mucho nos hicieron creer que íbamos camino al mismo. Vamos a lograr algunas cosas de ese mundo, entre ellas la “primavera silenciosa”.

PD: esta carta fue enviada y publicada en el diario “Río Negro” el 30/6/2002. ¿Hemos avanzado?

Julio Daniel Carnevale

LE 5.185.068

“Desde hace más de 20 años propuse, inicié y traté de llevar

adelante proyectos de este tipo, que por supuesto fueron abandonados”.

Julio Daniel Carnevale

LE 5.185.068