La reducción de horas extras afecta al hospital cipoleño

Con el decreto 58/17 del gobierno provincial, el área de pediatría del hospital de Cipolletti sufrió un importante recorte en su oferta de salud pública, aseguraron ayer integrantes de la institución. La resolución del Ejecutivo entró en vigencia el 1 de marzo y eliminó el 25% de las horas extras. Ayer se realizó una asamblea en el centro de salud y se resolvió una movilización para el lunes 27.

Los trabajadores detallaron que el recorte más significativo fue la eliminación del consultorio de demanda, en el que trabajaban dos profesionales. Aseguraron que atendían alrededor de 60 pacientes diarios, sin contar la mañana, franja horaria donde generalmente hay hasta cuatro pediatras.

Desde el gobierno provincial aseguraron ayer que los servicios esenciales en los hospitales de la provincia están funcionando con normalidad y ratificaron la importancia del informe de la auditoría que se realizó para lograr el “buen funcionamiento de cada servicio y revisar las horas que requerían ser cubiertas fuera del horario laboral”, argumentó Mercedes Iberó, titular de Relaciones Institucionales del ministerio de Salud.

Desde el hospital cipoleño, sin embargo, denunciaron que se sacó una media guardia de pediatría durante los fines de semana que tenía como objetivo apoyar el trabajo del área del hospital que atiende la demanda de todo el Alto Valle Oeste, desde Catriel a Fernández Oro. Además, argumentaron que “están en peligro” los programas de atención paliativa, consultorio de obesidad y consultorio de maltrato y abuso infantil. “Nos dijeron que si no podíamos cubrirlos con las horas que tenemos ahora, que los cerremos”, detalló Andrea Vélez, una de las siete médicas que trabajan en el área.

Estos tres programas que fueron iniciativas del propio sector no tenían ninguna contraprestación, es decir que debían organizarse con las horas que tenían, que ahora son menos. Los programas tienen un año de existencia y podrían desaparecer. “Hay una falta de estímulo total a los trabajadores, no les interesa lo que se hacés, no les importa”, expresó Vélez. La jefe del área, Nelly Rodríguez, aseveró que hay un control “muy exhaustivo” por parte de las autoridades del hospital. El delegado del ATE Jorge Núñez admitió que se trata de una “persecución” y aseguró: “Vamos a seguir luchando hasta que se derogue el decreto”.

Los servicios que se resintieron

Consultorio de demanda dejó de funcionar. Era un refuerzo de las guardias y atendía alrededor de 60 niños por día.

Recortaron una guardia por fin de semana, en el mismo sector.

Corren riesgo los programas de obesidad y de maltrato y abuso infantil, a los que se les destinaban dos días de atención.

Hay preocupación por el programa de atención paliativa que atiende a los enfermos graves y terminales en su
domicilio.

“Hay una falta de estímulo total para los trabajadores de la salud pública, no se puede competir con Neuquén que paga el doble”,

expresó Andrea Vélez, pediatra del hospital de Cipolletti.