Ritmos urbanos: el hip hop inunda las calles cipoleñas

Cuando el sol acompaña, en el centro de la ciudad se brindan verdaderos espectáculos de danza cuando un grupo de jóvenes practican break dance y dan vida al escenario urbano cipoleño. Allí varios B-boys y B-girls bailan al ritmo del hip hop, musicalizados con parlantes o con un beatbox realizando sonidos de percusión con la boca. Este estilo importado de Norteamérica comenzó a crecer en la región y desde los años ochenta empezó a practicarse en las calles y en varios festivales que se llevan a cabo, adonde también se aprendían pasos y ritmos.

Yovany Carvajal se crió en Cipolletti y durante su adolescencia se interesó en la danza del hip hop, mayormente conocido como break dance, inspirado justamente por la película “Breakin’”, que en 1984 colaboró con la propagación del naciente estilo. Hace 14 años brinda talleres para aprender esta disciplina en muchos barrios de las ciudades del Alto Valle rionegrino. “Esto lo aprendimos en las calles, en las plazas. No había institutos de danza, es algo que se practica en los barrios, con mucha carga social”, resumió.

“Cuando tenía 14 años, con mi grupo de amigos alquilamos durante un mes la película, que llegó varios años más tarde al país. Veíamos los movimientos que ellos hacían y los copiábamos”, relató. “En aquellos años no había presentaciones o festivales, bailábamos en los boliches. Así, entrábamos gratis a Clash, After o Aquelarre y mostrábamos los pasos que aprendíamos”, bromeó.

Actualmente Yovany da clases en los centros comunitarios de los barrios cipoleños Antártida Argentina, del Trabajo y en el Distrito Vecinal Noreste, enseñando a unos 70 niños y jóvenes. Por estos días, dos jóvenes alumnos de Fernández Oro y una de Cipolletti fueron seleccionados para la final que enviará sólo a dos parejas a los Juegos Olímpicos de la Juventud. El certamen se llevará a cabo el año que viene en Buenos Aires, con la novedad del break dance, el karate y la escalada, las tres nuevas disciplinas que se sumarán a esta edición. A finales de octubre se llevará adelante la última preselección, en la que sólo dos parejas avanzarán a la competición mundial de la que participarán 81 países. Otra de sus alumnas está incluida en los juegos Encuentro Cultural, cercana a llegar a la final, que se disputará en septiembre.

“La idea siempre es que el break dance se haga conocido, que lo hagamos conocer. La oportunidad de estar en un Olímpico es un gran logro para mí, no sólo es la primera vez que mis alumnos participan de esta competencia sino también es la primera vez que el break dance participa”, explicó emocionado. “Cuando nos dijeron que se incluía el break dance fue un balde de agua fría. Yo quise todos estos años que estos chicos puedan experimentar esto, que los que se animan a bailar se dediquen a esto”, agregó.

Yovany recordó que fue su difunto hermano quien lo impulsó a dedicarse a la danza. “Nosotros trabajábamos juntos en una fábrica de Fernández Oro, el falleció ahí, en un accidente laboral”, recordó emocionado. “Yo pasaba música en una matinée y una vez vi a un grupo de chicos bailando. Cuando falleció mi hermano renuncié a la fábrica y en otra matinée vi de nuevo a estos chicosy les ofrecí enseñarles, y así empecé con esto”, confesó con orgullo.

Años más tarde, durante el gobierno de Alberto Weretilneck en la ciudad, aquel flamante bailarín presentó un proyecto en la Dirección de Cultura y comenzó a brindar talleres sociales, que de forma gratuita se continúan ofreciendo a muchos niños y jóvenes de la región, sumándose Allen, Fernández Oro, Contralmirante Cordero y Barda del Medio a esta oferta.

“Esta es una práctica que no termina nunca. Para los que quieren competir, uno siempre se está preparando, siempre hay nuevos pasos para aprender”.

Yovany Carvajal brinda talleres de break dance gratuitos.

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