Una batalla que no es suya
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- “Los Messi se sienten utilizados en una guerra entre Cataluña y España que no va con ellos. Y puede que no les falte algo de razón”. Lo escribió ayer el periodista Xavier Bosch en el diario Mundo Deportivo, de Barcelona. Su colega Sport ya lo había escrito mucho antes. Sucede que, por un lado, sorprendieron siempre la dureza y los tiempos con los que la justicia española falló el delito de evasión fiscal cometido por Leo Messi y su padre. El Supremo confirmó la pena de 21 meses de prisión en contra de Messi, a tres días de la final de mañana de Copa del Rey contra Alavés, único título consuelo que podría ganar Barcelona en la temporada.
- Sorprende todo más todavía si se lo compara con el caso de Cristiano Ronaldo. Los períodos investigados son similares. Los tiempos y las condenas no. El diario madrileño El Mundo es el único de España que forma parte del grupo de medios europeos que publican las informaciones filtradas a través de Football Leaks sobre los trapos sucios del fútbol. Ayer informó que la Hacienda española concluyó un informe que presentó a la Fiscalía de Delitos Económicos de Madrid acusando a Ronaldo. El crack de Real Madrid pagó 5,6 millones de euros que adeudaba, como también pagó Messi. Pero, a diferencia del argentino, a él sí le bastó para salir indemne. Hacienda denuncia ahora que, en rigor, Ronaldo debió haber pagado no 5,6 sino 15 millones de euros más.
- Ahora será la Fiscalía la que debe decidir si se querella contra Ronaldo, como lo había hecho con Messi, o si archiva el caso. La abogada del Estado que llevó adelante la querella contra Messi, se supo tiempo después, era y es asistente habitual al palco de Real Madrid. Hay más. Barcelona cree que basta ver las denuncias de Football Leaks para advertir irregularidades en el fichaje de Gareth Bale por parte de Real Madrid. Sin embargo, el caso Bale jamás tuvo la lupa judicial que sí tuvo en cambio el fichaje de Neymar. Toda la cúpula directiva de Barcelona está bajo proceso judicial por el pase del brasileño, por no mencionar al expresidente Sandro Rosell, que duerme en la cárcel desde hace tres días, por otro delito. Más allá de que las acusaciones de todos los casos puedan ser ciertas, Barcelona sospecha que tanta saña se debe pura y exclusivamente a represalias del gobierno español por los reclamos de independentismo catalán. Y que Messi tiene razón. Que él está en el medio de una batalla que no es suya.
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