Vettel pintó de rojo el estreno del Mundial

Fórmula 1

En el inicio del Mundial de Fórmula 1 en Australia, Sebastian Vettel le ganó la pulseada a Lewis Hamilton y celebró con la Scudería después de un año y medio de sequía.

La prematura entrada a boxes de Mercedes y el gran funcionamiento de la SF70H fueron decisivos para el triunfo de Vettel, escoltado por Hamilton y Valteri Bottas.

Fue un desahogo pero también una luz de esperanza. Sebastian Vettel y Ferrari volvieron a subir a lo más alto del podio en el arranque del Mundial de Fórmula 1, en Melbourne, Australia, y le devolvieron la alegría a los tifosi.

En la largada, Hamilton tomó la punta y Vettel se metió detrás, no perdiendo el ritmo y siguiéndole el paso al W08, primer síntoma de que la Ferrari estaba viva. Pero Lewis comenzó a perder la prueba en su ingreso a boxes en el giro 17, cuando colocó neumáticos blandos y quedó detrás de Max Verstappen a la salida, con mucho tráfico en pista. Estuvo varias vueltas detrás de su rival y desgastó el caucho para tratar de sobrepasarlo.

En la ronda 24, Vettel entró a los pits para colocar blandos y salió delante de Verstappen y Hamilton, quien aún peleaba por el lugar. Dos rondas más tarde, el de Red Bull se metió en los garajes y le quedó la vía libre al piloto de Mercedes, pero el de Ferrari estaba a más de seis segundos en la punta.

Para colmo, Hamilton se empezó a preocupar más en la remontada de Valtteri Bottas que en acercarse al líder.

Luego de 27 pruebas, Ferrari volvió a celebrar un triunfo, el 225 de su historia, y Vettel, su 43 victoria personal, cuarta con la Rossa.

“Fue un trabajo fantástico del equipo. Estoy muy feliz por el auto que me dio y por volver a la victoria”, afirmó Vettel.

El número

de la Scudería

victorias acumula Ferrari en su campaña en Fórmula 1. Hacía 27 pruebas que no ganaba.