Expertos en lobby petrolero

El lobby petrolero tiene en el MPN a uno de los mejores exponentes del país y dentro del partido existe una selección de operadores que no supera los dedos de una mano pero ejercen influencia suficiente como para provocar desequilibrios.

Lo ocurrido sobre el cierre de la semana en Rincón de los Sauces es una muestra del ensamble profundo que tiene el oficialismo con la industria hidrocarburífera y el daño que puede causar al sector cuando, como en este caso, surgen diferencias entre dirigentes del partido. También se observó esta semana, pero en el sentido inverso, cómo las voces entrenadas para este fin operan para bajarle el tono a un debate central como el que se planteó a partir del decreto del gobierno nacional que dejó sin protección legal a los recursos naturales para poder utilizarlos como garantía de pago en compromisos de deuda externa.

En el primer caso, el del conflicto sindical de Rincón de los Sauces que puso al límite el abastecimiento de gas y dejó sin servicio de luz a las localidades del norte de la provincia durante diez horas, mostró una interna del sindicato no resuelta, en la que un dirigente con manejo de territorio gremial y político, el intendente de la ciudad petrolera e integrante de la conducción del sindicato Marcelo Rucci, sacó las garras una vez más. Algunos creen que lo hizo para mostrárselas a su jefe sindical Guillermo Pereyra, y otros hicieron lecturas más suspicaces.

Especulaciones al margen, lo cierto es que el secretario general del gremio quedó con el pie cambiado en la marcha de este episodio. Mientras Pereyra aconsejaba desde Houston a los trabajadores petroleros de Santa Cruz a ser prudentes con los reclamos por la falta de trabajo, en su territorio se estaba gestando un conflicto que golpeó fuerte los intereses de YPF. Se lo contuvo el viernes a la noche con una conciliación obligatoria resuelta por el Ministerio de Trabajo de la Nación.

Pereyra viajó a Estados Unidos junto al presidente Mauricio Macri. Lo acompañó en el tramo petrolero de la gira y en ese contexto hizo declaraciones sobre las demandas de los trabajadores santacruceños con argumentos más alineados al que utilizan las empresas para defender sus intereses que a lo que se podría esperar de un líder sindical.

En su afán por construir espacios de poder con fronteras tan diversas, Pereyra fue corriendo el límite de las concesiones y la silueta de su fuente original de poder, la del gremio, se desdibujó con decisiones clave como la flexibilización laboral que aceptó para que “cierren los números” de producción en Vaca Muerta. De hecho, su presencia en la gira junto a Macri tuvo ese sentido: mostrar a un dirigente gremial que “comprende” el actual momento de la industria.

Sobre el decreto 29 de este año del gobierno nacional, el que habilita al uso de los recursos naturales como garantía de pago de la deuda externa, no hubo pronunciamiento del gremio petrolero, un tema que institucionalmente podría despertar interés a la conducción aunque no se trate de un aspecto coyuntural referido a los salarios.

La primera reacción del gobierno fue “en off” con una explicación formal sobre el resguardo constitucional que tienen las provincias sobre la propiedad de los recursos naturales. El argumento fue engordado luego por el exgobernador Jorge Sapag, que vuelve a escena en pequeñas dosis con temas relacionados a la industria petrolera en un año electoral. Por último, Omar Gutiérrez cerró la semana con una queja: dijo que el decreto debió incorporar el paraguas legal sobre los recursos.

La historia del MPN es indivisible del manejo de los recursos naturales. Marcó la política y el desarrollo de la economía de Neuquén. Pero el comportamiento de los dirigentes del partido respecto del uso del gas, del petróleo e incluso del agua para la generación hidroeléctrica mostró diferentes etapas a lo largo de la historia. No estaría de más, para ampliar la mirada sobre un tema que genera controversia y ya originó una presentación judicial, que los referentes del MPN con voz predicadora se preguntaran, por ejemplo, qué postura tomaría Felipe Sapag frente al decreto 29 de Macri.

Lo ocurrido en Rincón de los Sauces es una muestra del ensamble profundo que tiene el MPN con la industria hidrocarburífera y el daño que puede causar.

En sentido inverso, el oficialismo puede bajarle el tono a un debate como el que plantea el decreto de Macri sobre las garantías para la deuda.