Brasil vuelve al drama: inician el juicio político a Rousseff

Las últimas medallas fueron entregadas, todos los atletas volvieron a sus casas y los fuegos de artificio en el estadio Maracaná de Río de Janeiro están convirtiéndose en un recuerdo. Ahora comienza el verdadero drama de Brasil.

Los senadores brasileños comenzarán desde hoy el juicio político para decidir si destituirán permanentemente a la presidenta Dilma Rousseff, el punto más álgido de una prolongada batalla política que ha expuesto una profunda polarización en el país más grande de América Latina.

Rousseff volvió a aparecer más a menudo en público, después de semanas retirada a un segundo plano. “Luchar”, es una de las palabras que más repite la mandataria antes de que arranque el proceso que, previsiblemente, la apartará de forma definitiva del cargo para el que fue elegida por primera vez en 2010.

Rousseff está acusada de maquillar las cuentas públicas para ocultar la verdadera dimensión del déficit estatal, entre otras razones para asegurar su reelección en el año 2014.

El proceso en el Senado empieza este jueves y podría acabar el 30 o 31 de agosto. Si dos tercios de los senadores votan a favor del “impeachment”, Rousseff habrá perdido definitivamente la presidencia, algo altamente probable, ya que fue la misma Cámara alta la que la suspendió de sus funciones el 12 de mayo por 180 días y votó 59 contra 21 a favor de la apertura del juicio político final.

Si el voto se repite, el hasta ahora vicepresidente de Rousseff y actual jefe de Estado interino, Michel Temer, pasará a ocupar las presidencia de forma definitiva hasta las elecciones de 2018.

El proceso prevé jornadas maratónicas en las que los partidarios y detractores de Rousseff presentarán sus argumentos. El lunes, la propia mandataria tiene previsto asumir su defensa.

El proceso está enmarcado en una telaraña de intrigas y denuncias de corrupción relacionadas a la petrolera estatal Petrobras que desacreditan a la política brasileña desde hace meses. Y aunque muchos cuestionan la legitimidad del juicio a Rousseff la mandataria se ha quedado casi sin apoyos políticos reales: es impopular en la calle y se quedó sola en el Congreso.

“Ese proceso, para mí, es muy duro (…) Sé que soy inocente y que es una injusticia lo que están haciendo conmigo”.

Dilma Rousseff, presidenta suspendida de Brasil.