Papa Francisco instó a los jóvenes a “levantarse del sofá” y dejar de “vegetar”

“Para muchos es más fácil y beneficioso tener a jóvenes embobados y atontados que confunden felicidad con un sofá”, sostuvo el pontífice en Polonia.

El papa Francisco instó hoy a los jóvenes a “decidir su futuro y no vegetar en un sofá”, en su mensaje de vigilia a los participantes de la Jornada Mundial de la Juventud en el “Campo de la Misericordia”, cerca de la ciudad polaca de Cracovia.

“Queridos jóvenes, no vinimos a este mundo a vegetar, a pasarla cómodamente, a hacer de la vida un sofá que nos adormezca. Al contrario, hemos venido a otra cosa, a dejar una huella”, dijo Francisco.

“Un sofá que nos haga quedarnos en casa encerrados, que nos garantice horas de tranquilidad, sin fatigarnos ni preocuparnos. Un sofá, como los que hay ahora modernos con masajes adormecedores incluidos, que nos garantiza horas de tranquilidad para trasladarnos al mundo de los videojuegos y pasar horas frente a la computadora”, agregó el sumo pontífice, de 79 años.

“Para muchos es más fácil y beneficioso tener a jóvenes embobados y atontados que confunden felicidad con un sofá. Pero el tiempo que hoy estamos viviendo, no necesita jóvenes-sofá, sino jóvenes con zapatos; mejor aún, con los botines puestos”, enfatizó ante los jóvenes que participan de la vigilia, cuya cifra según los organizadores está por encima de un millón.

Más temprano, durante la misa celebrada en el santuario dedicado a Juan Pablo II en Cracovia, el papa argentino dijo que quiere una Iglesia más abierta y modesta, y que esta apertura no sea como hombres de poder, sino como esclavos.

“Él (Jesús) deseó desde el principio que la Iglesia salga, que vaya al mundo. Y Él quiere que lo haga de la misma manera en que fue enviado al mundo por el Padre: no como un hombre de poder, sino como un esclavo”, dijo durante la homilía ante sacerdotes, seminaristas y prelados celebrada en el marco de la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ).

“En nuestra vida como sacerdotes y personas marcadas por dios, a menudo ocurre que intentamos permanecer encerrados un poco en nosotros mismos y en nuestro círculo, bien sea por temor o por comodidad”, añadió el pontífice argentino. “Pero la dirección que nos da Jesús es una carretera de sentido único: salir de nosotros mismos. Es un viaje sin billete de vuelta”.

Cualquiera que se haya decidido a vivir su vida como lo hizo Jesús no debe desperdiciar “el tiempo en planear un futuro seguro y bien remunerado, para no caer en el aislamiento o la oscuridad, encerrado en sus propias paredes de un egoísmo sin esperanza y sin alegría”, añadió.

Pese a los bombardeos y la guerra civil en que está sumida Siria, centenares jóvenes católicos celebran también en Alepo la JMJ. Unos 1.200 jóvenes enviaron un videomensaje al papa Francisco desde Alepo.

“Hacer algo así en tiempos de guerra no es fácil, tuvimos muchos problemas, pero intentamos gestionarlos”, dijo el padre Pier, de la orden salesiana. Más de 30 congregaciones, grupos eclesiásticos y colegios participaron en el encuentro en la iglesia Santa Matilde de Alepo.

Durante la JMJ, que se prolonga hasta mañana, el pontífice argentino ha realizado numerosos llamamientos de ayuda a los sirios, pidiendo que sean acogidos. Alepo se ha visto especialmente afectado por la guerra civil que sufre el país, pues la cúpula siria continúa bombardeando allí los barrios rebeldes. Naciones Unidas informó la semana pasada de ataques a cuatro hospitales de la ciudad.

El papa tomó en confesión a varios jóvenes y además se reunió con una chica sin piernas, cuyas prótesis había pagado el propio Francisco.


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