Les cortaron la calle y las ventas a los comerciantes de Neuquén

En Láinez el Municipio construye desde hace quince días un nuevo pluvial para evitar inundaciones en el sector. Las obras se extenderán por un mes y medio más. Los comerciantes se quejan.

Las obras en las que está trabajando el municipio en calle Láinez, prometen un gran alivio en el sistema pluvial de la zona. Pero a quince días del anuncio no son buenas noticias únicamente. Y es que el sector comercial se ve afectado por la poca circulación de gente que hay, debido al corte de calles aledañas que llevará al menos otros treinta días más.

En la actualidad el tramo afectado a los trabajos es entre las calles Planas y Alcorta, el segundo mes será entre Alcorta y Sarmiento. Los comerciantes están preocupados por la importante baja en las ventas que han sufrido por las obras y aseguran que la perdida en las ventas oscila entre un 50% y un 60%.

El encargado de un local que presta servicios para el automotor, Hugo Huentelaf dijo que “la diferencia en las ventas es muy grande y nos perjudica a todos. En total tenemos 4 entradas para vehículos, con el tema de las obras perdemos 2 entradas. Entonces mi capacidad productiva se reduce más de un 50% aproximadamente”.

Huentelaf contó que económicamente es una importante pérdida para los bolsillos de los empleados porque “acá trabajamos todos por comisión, entonces económicamente nos perjudica mucho. Y lo complicado es que recién vamos 15 días, falta un mes y medio más”.

El dueño de una armería, Jorge Quinteros ironizó con respecto a la obra y dijo “con respecto a eso y a las ventas es mejor ni hablar, hemos perdido la calle en un 100% y ese cliente representa un gran porcentaje en las ventas. El que tiene que venir por su trabajo, viene igual”. Además agregó que “en febrero empieza la temporada alta, porque la cacería se habilita el primero de marzo, entonces febrero es cuando yo en realidad tendría que empezara trabajar bien y la verdad es que no estoy trabajando nada.

El encargado de un local de pesca y camping, Leonel Rodríguez expresó que “la verdad que esto está para atrás. En números esto nos afectó entre un 50% y un 60% en las ventas. Eso lo calculamos con lo que veníamos vendiendo y con las ventas del año pasado”. Al igual que otros comerciantes de la zona, la obra comenzó en los momentos donde las ventas deberían incrementar. “El mayor problema lo tuvimos con el tema de la clientela, en este momento deberíamos estar en temporada alta con respecto a las ventas, deberían estar a pleno las ventas, pero claramente no es lo que está pasando”.

En Láinez se está colocando un pluvial de tres metros de ancho que se unirá al tramo de calle Planas y conducirá el excedente del agua de lluvia.

Los dos negocios que venden armas son los más afectados, porque en marzo comienza la temporada de caza y febrero es el mes fuerte de ingreso de clientes.

El aviso de corte

llegó con anticipación

Meses antes de que comience a trabajar la primera retroexcavadora, personal del municipio les notificó a los comerciantes de la zona sobre la obra, duración y también explicó la importancia que representa ese trabajo para la zona. La arquitecta encargada de la obra Gisell Vrizz dijo que “hace tres meses cuando ya sabíamos que íbamos a encarar la obra les habíamos avisado a todos los comerciantes la situación. La única complicación que tuvimos fue con un mayorista porque ellos entran y salen con camiones todo el tiempo, entonces se les dejó un tramo para el ingreso y salida de vehículos”.

El objetivo de la obra pluvial es permitir un rápido escurrimiento de agua para cuando se produzcan lluvias importantes.

La voz de los

comerciantes

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Datos

Los dos negocios que venden armas son los más afectados, porque en marzo comienza la temporada de caza y febrero es el mes fuerte de ingreso de clientes.
“Al tener sólo la mitad de las entradas me limita para poder mover los autos en el local”.
Hugo Huentelaf, servicios del automotor
“En las ventas se evidencia entre un 50% y un 60% de pérdidas. Siempre pasaban por un regalito, ahora ya no”.
Jorge Quinteros, armería
“La gente que viene se tiene que comer el viaje de buscar estacionamiento lejos y caminar hasta acá. Esos clientes se pierden”.
Leonel Rodríguez, casa de pesca
“Hasta ahora no hemos tenido quejas, saben que la obra la necesitamos todos porque acá se inunda todo cuando llueve”.
Gisell Vrizz, directora de obra

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