Múltiple donación de órganos: diez personas con nuevas chances

Una ablación múltiple se concretó con éxito en Neuquén. Una joven de 25 años en emergencia nacional fue la receptora de los pulmones; los otros órganos llegaron a otros destinatarios.

“Donar es dar vida”, dice la frase que resume el operativo que se realizó esta semana en Neuquén. Todo empezó con una desgracia, siguió con una familia que en medio del dolor entendió la importancia de donar. Fue fundamental el trabajo coordinado del Cucai, la Clínica Pasteur y diversas organizaciones. El final son diez personas que hoy tienen una nueva chance de vivir.

Sandra González Cruz, referente del Cucai, comentó que todo comenzó el sábado, cuando desde la Clínica Pasteur les avisaron la posibilidad de una muerte encefálica en la institución. Ellos se hicieron presentes en la clínica y comenzó el proceso de donación.

“La Ley 24.193 dice que todo paciente en coma, se le debe dar aviso al Incucai. De esa cantidad, hay un porcentaje que le va bien, y otro que fallece. Después vuelven a avisar con el diagnostico de muerte bajo criterios neurológicos. Cuando el donante lo dejó asentado en el DNI, es más fácil, si no hablamos con la familia y tratamos de obtener el testimonio en vida de la persona fallecida”, dijo Sandra González Cruz.

Así lo realizaron con la familia de esta mujer de 46 años. Sandra comentó que lo mejor es que la decisión se tome en vida, cuando está bien e informada. Dijo que no condice con la situación de pérdida, que son cosas que van por separado.

“Una cosa es la pena, y otra es respetar lo que quería, con una casa, con un perro o lo que sea. Es un momento difícil para la familia, pero no tiene que ver con la donación si no con la pérdida. Donen o no la perdida está”, dijo Sandra.

La familia así lo entendió y entre el domingo y el lunes un megaoperativo se puso en marcha. El equipo del Cucai estudió al donante en cuanto a tipo de sangre, vieron que no tenga enfermedades infectológicas, analizó la genética. De acuerdo a eso se formó la lista de espera. La otra parte del equipo compuesto por cirujanos del equipo del Hospital Castro Rendón, podían extirpar los riñones, porque no están capacitados para lo demás, por lo que llegaron refuerzos de Buenos Aires.

El lunes a las 2:30 de la mañana y 4.30 llegó un equipo del Fundación Favaloro para hacer la ablación de los pulmones y el Hospital Argerich, para hacer la extracción hepática. Cada equipo estaba compuesto de cinco profesionales, con equipamiento y en aviones particulares. Se pudo hacer la extracción de los dos pulmones, hígado, riñones, corneas y válvulas cardíacas.

“Es la primera vez que en la ciudad se hace ablación pulmonar, porque el donante tiene que estar en perfectas condiciones, y generalmente con la muerte es lo primero que se llena de agua. Desgraciadamente los pacientes en lista de espera, son menores de 30 años, porque la mayoría es por fibrosis quística que requiere transplante bipulmonar”, contó Sandra.

Desde el Cucai destacaron el trabajo en equipo. Para el operativo se usó el equipo disponible del Cucai, ambulancias del hospital Castro Rendón; viajaron dos equipos de Buenos Aires; el doctor Ramiro Vaca Narvaja de la Clínica Pasteur acompañó en lo profesional y también el equipo del Policlínico Neuquén. Hoy diez personas, tienen su órgano y están muy bien.

El operativo se realizó esta semana. La muerte encefálica de la mujer se produjo el sábado y al día siguiente comenzó el operativo.

“Es la primera vez que en la ciudad se hace ablación pulmonar, porque generalmente con la muerte es lo primero que se llena de agua”.

comentó Sandra González Cruz, referente del Cucai que viajó a Neuquén.

Los receptores

El Incucai tiene listas de espera de órganos con características de tiempo ya sea emergencia, urgencia, electivo.

En este caso se pudieron trasplantar ambos pulmones a una mujer de 25 años, que estaba en lista de espera como urgencia nacional; también una mujer de 47 años que recibió el hígado.

Los riñones fueron implantados en una mujer joven que se dializaba hace siete años y a un hombre que lo hacía hace cinco. Por otra parte, las válvulas cardíacas fueron al banco del hospital Garrahan; y se está definiendo el destino.

Datos

“Es la primera vez que en la ciudad se hace ablación pulmonar, porque generalmente con la muerte es lo primero que se llena de agua”.

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