Nueve años después pudo ser imputado de matar a seis personas

El acusado de homicidio culposo es Enrique Martínez, apuntado como el autor de un incendio intencional en la toma El Tanque ocurrido en el 2007. Quedó detenido con prisión preventiva.

Nueve años y 21 días pasaron hasta que la Justicia pudo dar inicio al proceso que busca esclarecer un incendio intencional en el que fallecieron seis personas y donde Enrique Martínez es el principal sospechoso. Ayer la fiscalía acusó al hombre de homicidio calificado y pidió la prisión preventiva por un plazo de seis meses, debido al riesgo de fuga.

Martínez fue capturado el 29 de noviembre de este año alrededor de las 20 en Aguas Calientes, Jujuy, tras una larga investigación. Vivió en la clandestinidad desde el momento mismo en que se produjo el hecho que le endilgan, ocurrido en el 2007.

Tanto la policía de Neuquén, como la de Salta y la de Jujuy trabajaron en conjunto para dar con su paradero. Según confiaron autoridades policiales de Neuquén, Martínez siempre fue astuto y escurridizo, se trasladaba constantemente entre las casas de sus familiares del norte del país y de Bolivia, cambiando su identidad y hasta borró sus huellas digitales para evitar que lo identifiquen. Pero su suerte se acabó luego de que la policía salteña lo detectara trabajando en una cantera de la localidad de La Merced.

Recién el jueves a la una de la madrugada una comisión de la brigada de Recaptura de la policía neuquina, que depende del departamento de Delitos Contra la Propiedad y Leyes Especiales, arribó con el sospechoso a la provincia.

Ayer por la mañana el fiscal de Graves Delitos contra las Personas, Maximiliano Breide Obeid, lo acusó de homicidio calificado y solicitó la prisión preventiva, pedido al que la jueza de Garantías Ana Malvido hizo lugar.

Durante la audiencia, Breide Obeid expuso la teoría del caso y detalló que el día del incendio Martínez compró un bidón de nafta en una estación de servicios del barrio Parque Industrial, luego se dirigió a la vivienda de su expareja, y “con la intención de dar muerte, roció la parte exterior de la precaria vivienda y luego encendió el fuego, conociendo que en su interior había personas”, sostuvo. Aquel día murieron en el instante cinco personas, y a los pocos días el único sobreviviente del siniestro, un niño de 9 años –ver aparte–.

Tras el incendio, en el lote donde estaba la casilla incendiada quedaron sólo cenizas. Hoy el paisaje contrasta, los familiares de las víctimas se fueron del barrio y los vecinos convirtieron el lugar en una plaza.

Qué ocurrió aquella trágica madrugada de noviembre del 2007

Datos

El 18 de noviembre de 2007, pasadas las dos de la madrugada, los vecinos del la toma El Tanque se despertaron con un gran resplandor. Un incendio que redujo a cenizas la precaria vivienda donde habitaba Johana Sánchez (19) y Diego Villegas (23). Ambos eran pareja y tenían un pequeño hijo de seis meses.
Ese día, en la vivienda también se encontraban dos pequeñas de 9 y 7 años que fueron identificadas como Anahí y Vanesa Sánchez, hermanas menores de la joven madre. Milton Sánchez, también de 9 años, fue rescatado por sus vecinos y logró sobrevivir al siniestro, pero las quemaduras alcanzaron un 50% de su cuerpo y perdió la vida tres días después en el hospital Castro Rendón.
En un primer momento las hipótesis que manejaban los bomberos de la policía apuntaban a que un corto circuito había originado las llamas. Sin embargo la madre de Johana Sánchez, Paola Díaz, denunció desde el primer momento que Enrique Martínez había amenazado a la joven con incendiar su vivienda. Pruebas realizadas posteriormente corroboraron la presencia de sustancias inflamables y se determinó que el incendio fue intencional.

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