Investigan ataque incendiario en la Comarca Andina

Ardieron dos retroexcavadoras dentro de una explotación de turba en El Hoyo. Analizan si fue intencional.

Otras dos máquinas retroexcavadoras -valuadas en un millón de pesos-, ardieron ayer por la madrugada, en lo que se presume un incendio intencional, dentro de una explotación de turba y donde las pérdidas fueron totales.

En el lugar se encontraron volantes del grupo radicalizado Resistencia Ancestral Mapuche (RAM), aunque hasta el momento nadie se adjudicó el atentado.

El texto dice: “Basta de represión ilegal a las comunidades mapuches. Libertad al lonco Facundo Huala. Fuera Benetton, Lewis, Krist, Van Ditmar, Breire. Fuera transnacionales, petroleras, mineras, hidroeléctricas. Por todo el territorio libre y recuperado”, coincidentes a los encontrados el mes pasado en otros tres atentados simultáneos, con el saldo de dos máquinas viales quemadas sobre un camino de la costa del río Azul (afectadas al cableado eléctrico subterráneo desde Lago Escondido a El Bolsón); más una cabaña en el complejo La Catarata, en El Hoyo, propiedad del Sindicato de Petroleros Privados del Chubut.

En este caso, el predio pertenece a la firma Minas Magri y, según reveló la encargada, Cinthia Massa, el hecho “pone en riesgo la fuente laboral de 16 familias, ya que es una empresa familiar que nos está costando mucho sobrellevar y no tenemos los recursos para reponer las máquinas incendiadas”.

Las llamas fueron detectadas entre las 3 y las 4 por pobladores que viven en los alrededores del mallín turbero, aunque las condiciones propias del terreno no permitieron ingresar hasta las 8.30, cuando amaneció.

La propia brigada de investigaciones de la Policía del Chubut demoró 40 minutos, chapoteando entre el barro y el agua, para poder arribar hasta el punto donde las máquinas estaban paradas, a unos mil metros del acceso más cercano, entre los canales y balsas desde donde se extrae la turba que luego se procesa y se utiliza como absorbente en la industria del petróleo o como fertilizante orgánico.

A criterio del jefe de producción, Gustavo Bonansea, el ataque incendiario “fue protagonizado por alguien que conoce muy bien el terreno, ya que es muy difícil entrar”.

Resaltó enseguida que “esto nos perjudica muchísimo, sin estas máquinas (no estaban aseguradas) no vamos a subsistir como empresa ya que dentro de un mes nos quedaremos sin materia prima. En forma urgente necesitamos de ayuda externa ya que tenemos contratos que cumplir con firmas de Neuquén y otros puntos del país”, detalló.

El dato