Por la sequía, Carreras hará ajustes en el riego del Valle

El sistema de irrigación toma agua del río Neuquén. La gobernadora dijo que es uno de los efectos más preocupantes de la crisis hídrica, sumado a problemas de abastecimiento de agua potable en Bariloche.

La crisis hídrica traerá como consecuencia problemas en aspectos de la vida cotidiana y en la economía regional, según advirtió la gobernadora Arabela Carreras, que anticipó que se deberá controlar el uso del agua para riesgo en los Valles y realizar obras de contingencia para el abastecimiento en ciudades como Bariloche, ya afectadas por la falta del recurso.

Tras la declaración de emergencia de las cuencas de los ríos Limay, Negro y Neuquén, por parte de la Autoridad Interjurisdiccional de Cuencas (AIC), la gobernadora dijo ayer en Bariloche que la crisis hídrica es motivo de preocupación y señaló que se atraviesa el segundo año más seco de la última década.

“Estamos ante un desafío muy importante y es por ello que se declara la emergencia hídrica, para generar acciones de cuidado del agua y para observar las estrategias que vamos a llevar adelante, fundamentalmente de cara al riego en el Alto Valle y también en vista al abastecimiento en las ciudades”, afirmó ante la prensa.

Carreras contextualizó la situación regional y nacional en los efectos del cambio climático y remarcó que se evidencian condiciones extremas, con nevadas extraordinarias el año pasado, las que calificó como “las mayores de los últimos 30 años”, y sequía extrema en el verano, acompañada por caída de granizo en los valles, que motivó a destinar inversiones en mallas protectoras para los frutales.

Según la gobernadora, la crisis hídrica generará impacto en “distintos frentes” y a su entender, por el momento, “no implicará riesgo en la generación eléctrica, pero sí en el volumen de agua disponible para los cultivos”.

En cuanto al impacto directo en la población, Carreras hizo foco en el problema de agua potable en los barrios de las zonas Sur y Este de Bariloche, que se abastecen con agua captada del río Ñireco y actualmente esas tomas están por encima del nivel de recurso. “Todo el sistema se aprovisionaba del río Ñireco y hoy ese río no tiene agua, por lo tanto, lo debemos reforzar con otras estrategias”, apuntó.

En la ciudad andina se refuerzan las captaciones de agua del lago Nahuel Huapi, que cubren el Oeste y Centro, y se prevé a largo plazo realizar captaciones del lago Gutiérrez, para llegar a los barrios del Alto que desde el verano pasado sufren las consecuencias de la bajante del Ñireco.

También existe un proyecto de toma de agua del Gutiérrez para llegar al cerro Catedral y dotar del recurso al reservorio que se debe construir para ampliar la fabricación de nieve.


Formá parte de nuestra comunidad de lectores

Más de un siglo comprometidos con nuestra comunidad. Elegí la mejor información, análisis y entretenimiento, desde la Patagonia para todo el país.

Quiero mi suscripción

Comentarios