Descolorido clásico entre Roca e Independiente

Federal A

La noche en el Maiolino quedó en silencio. Deportivo Roca, al que le cuesta horrores marcar un gol, no pudo con Independiente (N) quien llegaba como líder y con Diego Landeiro pisando por primera vez el estadio con otro buzo de DT después de estar seis años en el Naranja.

El Coco fue aplaudido cuando enfiló hacia el banco visitante y hasta recibió una camiseta de parte de la subcomisión de fútbol antes de que la pelota rodara.

Fue un juego con altibajos lo que entregaron los protagonistas en la primera mitad. El Naranja presionó bien en los primeros minutos, con Kevin Guajardo erigido como lo más peligroso del ataque local.

De todas maneras, en medio de ese leve predominio de Roca, a los 10’ llegó la primera jugada de peligro y fue del Rojo. Desborde de Illanez, cabezazo a quemarropa de Ávila y tapada fenomenal de Paniccia.

A partir de ahí, el equipo neuquino fue mejor. No por posibilidades de gol, sino porque tuvo más la pelota que su rival. El Rojo adelantó sus líneas con Manolo Berra como estandarte en el medio y generó algunas chances con disparos desde afuera del área. Berra tuvo dos y el otra Hugo Hernández, pero las tres se fueron por arriba del travesaño.

Los centrales de Independiente anularon a Jonathan Durán, Guajardo se quedó sin socio y para colmo de males para Roca, a los 29’ salió lesionado Héctor Castro (lo reemplazó Sarsa).

Sin embargo a los 34, estuvo a punto de ponerse arriba. La robó Guajardo en la mitad de la cancha, cedió para Guevara por derecha quien en vez de rematar al arco, buscó a Durán por el centro del área que una vez más, fue anticipado por la defensa visitante.

En el ST, la dinámica fue otra. El Depo tuvo pasajes de buen fútbol en la primera parte de la etapa final y por momento Independiente lució perdido.

De todas maneras el Rojo recuperó la memoria entre los 10’ y los 15’, y el equipo del Coco casi lo pasa a ganar con Hernández, pero el delantero se lo perdió ante Paniccia. Sin embargo no fue tan clara como las dos chances que tuvo el Depo en los 15 minutos finales.

A los 30’, un centro de Sarsa derivó en Guevara, quien quiso colgar a Villalba, pego el remate dio en el travesaño. A los 44, a través de un tiro libre, fue a Valenzuela quien el palo le negó la conquista. Fue lo último del clásico que terminó en tablas, aunque ambos técnicos se fueron preocupados por la producción de sus equipos.

En los otros partidos de la fecha, Belgrano (SR) goleó a Rivadavia 5-1, mientras que Ferro de Pico cayó en su estadio ante Deportivo Maipú, por 2-1.