Cruzada de AFIP contra la evasión impositiva

Hace tiempo que AFIP implementa medidas a fin de reducir la evasión y elusión, con foco en pequeños contribuyentes, como en responsables inscriptos (RI).

Hemos comentado la potestad de exclusión y recategorización de oficio a monotributistas, y la posibilidad de inhabilitación a emitir factura “A” para RI ante inconsistencias detectadas sistémicamente, entre otras.

El Fisco decidió ahora concentrarse en las retenciones, percepciones y pagos a cuenta, instrumentos de enorme valor, que le permiten adelantar parte la recaudación, transfiriendo a los contribuyentes una enorme carga de trabajo destinada a la determinación y cobro de aquellas.

Recordemos que las retenciones las practica el sujeto pagador y las percepciones el vendedor, adicionándolas a la factura correspondiente. Por su parte, los pagos a cuenta, instrumento menos conocido, se aplican en virtud de algunos regímenes especiales que así lo disponen, como por ejemplo el de “operadores de la cadena de producción y comercialización de haciendas y carnes bovinas y bubalinas”.

Así las cosas, AFIP presentó ante algunas cámaras empresariales, el denominado “Servicio de Ingresos Directos (SID). Se trata de un servicio web que permitirá al contribuyente administrar débitos y créditos relacionados a regímenes de retención, percepción y pagos a cuenta de impuestos nacionales.

En términos sencillos el sistema implicará un cambio en la forma de liquidar las retenciones, percepciones y pagos a cuenta, pero sobre todo, afectará la operatoria habitual de pago a proveedores, ya que por cada uno de ellos, se deberá ingresar obligatoriamente a la página de internet de AFIP los datos inherentes a cada uno de los pagos que se realicen. Esta tarea se duplica en cabeza del contribuyente, puesto que seguramente los mismos datos deban ser cargados también en su sistema contable.

Llama la atención la nueva herramienta que parece ir en contra del contribuyente, considerando que el Fisco viene apostando a sistemas ágiles y amigables como por ejemplo el de cuentas tributarias. En este caso, no solo no reduce la carga administrativa, si no que a partir de su vigencia, la incrementará, lo que sin dudas, también podría jugar en contra del cumplimiento.

Dato

Consultor Pulso