“Hay que ir hacia una industria con competitividad sistémica”.

Carlos Banacloy, director de Vitivinicultura de Río Negro

El titular de la secretaria de Vitivinicultura de Río Negro, Carlos Banacloy, destacó que la industria se encuentra “fuerte” pese a las crisis recurrentes que afectaron a las economías regionales.

A continuación se detalla parte de la conversación mantenida con el funcionario.

P- ¿Cómo está la producción de uva para el mercado en fresco?

R- En Río Negro ha quedado limitada, hay muy poca superficie. No nos olvidemos del gran emprendimiento de 200 hectáreas que tenía Expofrut en Valle Medio. Eso ya no está. Pero es un negocio virtuoso.

P- ¿Por qué cae entonces?

R- Por falta de competitividad. El clima para producir en la Patagonia versus Mendoza o San Juan en algunos casos nos beneficia y otros no tanto. Tenemos condiciones como para producir en forma orgánica, pero también problemas con los fríos extremos que se manifiestan con heladas tempranas y tardías. Y esto es importante, porque los pequeños productores necesitan fuertes inversiones para poder sortear estos inconvenientes climáticos que, en la mayoría de los casos, no acceden. Y eso desanima.

P- ¿Con la uva para vino pasa lo mismo?

R- No. Hoy la realidad es que en Río Negro hay muchas más hectáreas vitivinícolas que con uva en fresco. De estas últimas no superamos las 60 hectáreas en producción mientras que de las primeras tenemos 1.600 hectáreas. Tenemos 33 bodegas habilitadas y más de 30 elaboradores artesanales de vino. Las categorías están divididas por cantidad. El elaborador casero tiene un techo de 4.000 litros, el artesanal de 12.000 y a partir de este volumen, es bodega. Río Negro entre elaboradores y bodegas estamos en 66 productores. Todas las bodegas son productores de uvas, una gran diferencia con otras industrias como la sidra, donde no hay productores.

P- Pero pese a estas bondades, ¿la vitivinicultura sigue en crisis?

R- Es relativo. La cadena vitivinícola es una de las más ricas que tiene el país. Hoy se exporta inclusive más que todo el complejo cárnico. Está fuerte. Y no se la visualiza de esta manera, ya que se la relaciona con el consumo interno. Si bien es importante la demanda local, hemos perdido el liderazgo porque no hace mucho tiempo estábamos ubicados en el puesto número tres de consumo en el mundo y hoy estamos más cerca del décimo.

P- ¿Y el mercado externo?

R- Hay que visualizar que hay una gran cantidad de países emergentes que están ávidos de probar este tipo de productos con una densidad de población mucho mayor la que la nuestra. Los países tradicionalmente consumidores de vinos siguen en baja y una tendencia opuesta se observa en los emergentes.

P- ¿Somos competitivos con un dólar a 16?

R- Hablar de competitividad sólo centrados en el tipo de cambio, es un tema complejo. No caben dudas que hoy un dólar a 20 pesos mejora la competitividad del sector pero lo hace sólo en forma coyuntural. Los problemas estructurales siguen.

P- ¿Por dónde pasa entonces?

R- Tenemos que trabajar sobre nuestros costos internos, carga tributaria, insumos, elaboración. Hay muchas diferencias en toda la cadena con competidores de la región. Sobre eso también hay que mejorar para ir hacia una industria con una competitividad sistémica, que no dependa del humor del valor de la paridad cambiaria de turno.

P- ¿La industria esta bien posicionada?

R- Tuvimos cambios importantes. Mientras las economías regionales ingresaban a partir de los 90 en una profunda crisis, la vitivinicultura pudo sostenerse tanto en volumen como en calidad llegando a tocar exportaciones por 1.500 millones de dólares en todo el país.

P- ¿Puede crecer?

R- La provincia de Río Negro debería consumir alrededor de 14 millones de litros de vinos, teniendo en cuenta que a nivel nacional el promedio per cápita es de 24 litros. Hoy nuestra provincia produce entre 7 y 8 millones. Es decir que hay un importante margen para abastecer nuestro mercado con producción local. No tenemos techo para crecer.

La actividad

en números

Pulso Entrevista

Datos

Según la estadística oficial, Río Negro tiene 1.659 hectáreas de vitivinicultura y Neuquén 1.751.
La producción de la región
de la Norpatagonia ronda los seis millones de kilos sobre un total a nivel país de 800 millones.
El departamento general
de Roca concentra la mayor parte de la producción vitivinícola rionegrina.
Por su parte la región de Añelo, en Neuquén, lidera la producción de la provincia.

Formá parte de nuestra comunidad de lectores

Más de un siglo comprometidos con nuestra comunidad. Elegí la mejor información, análisis y entretenimiento, desde la Patagonia para todo el país.

Quiero mi suscripción

Comentarios