La bacteriosis del nogal golpea la producción

Hasta la temporada 2012/2013 se observaban pequeños porcentajes de daño producidos por artrópodos. A partir de ese momento apareció esta enfermedad en la región.

LA VISIÓN DEL INTA

Desde hace una década, el cultivo del nogal se está incrementando en el Valle Medio del río Negro.

Actualmente existen 350 hectáreas en producción y se estima que se implantarán otras 130 hectáreas en el 2016, según datos relevados por la Agencia de Extensión Rural del INTA en esa región.

Hasta la temporada 2012/2013 se observaban pequeños porcentajes de daño producidos por artrópodos (carpocapsa-ectomyeloes), pero a partir de ese momento comenzaron a verse, en la mayoría de los montes de la región, manchas negras en el ápice y en las paredes laterales del fruto, en muchos casos con caída de nueces inmaduras (foto 1, pág. 5).

Los estudios realizados por la Universidad Nacional de Río Negro (UNRN) y el INTA determinaron que las manchas se debían a una enfermedad llamada bacteriosis del nogal, que afecta a la mayoría de los nocedales del mundo y es causada por Xanthomonas arborícola pv juglandis.

Durante las temporadas 2013/2014 y 2014/2015 se registraron ataques graves en Valle Medio y Valle Inferior, con pérdidas de hasta el 40% de la producción.

Si bien la bacteria es conocida en otras regiones del mundo, es prioritario saber cómo se comporta en nuestros valles a fin de implementar la mejor estrategia para su manejo. Por este motivo el INTA Alto Valle, a través de su Agencia de Extensión Rural en Valle Medio, está desarrollando una línea de investigación sobre la etiología y el control del patógeno de manera conjunta con productores locales, el Clúster de Frutos Secos de Río Negro y Neuquén, la Universidad Nacional de Río Negro, firmas fabricantes de agroquímicos y proveedores locales de agroinsumos.

Mediante este ensayo científico se comparan dos formas de control: una a calendario fijo (pulverizaciones cada siete días) y otra teniendo en cuenta los pronósticos meteorológicos y la fenología del nogal. Además, se evalúan diferentes principios activos y combinaciones entre ellos.

El estudio se realiza en la chacra de un productor, en un monte de nogal comercial de la variedad Chandler con pie hindssi (Junglans hindssi), con una densidad de plantación de 178 árboles por hectárea.

En la parcela se instalaron sensores de humedad, temperatura y hoja mojada para tener datos precisos de las condiciones meteorológicas in situ (foto 2).

Además, se colocaron en esa misma superficie “baberos” (foto 3) debajo de la proyección de los árboles, para determinar la causa de los frutos caídos. La recolección y observación de estos frutos se efectúa una vez por semana.

Resultados preliminares de la investigación y comparación con temporadas anteriores

A la fecha, los datos obtenidos son preliminares ya que el ensayo se encuentra en curso hasta el final de la temporada.

Durante la primera semana de diciembre del 2015, en montes donde años anteriores hubo alto porcentaje de infección se comenzó a observar una menor incidencia de la enfermedad en fruto. Incluso en muchas chacras no se registraron daños.

Comparando datos meteorológicos de años anteriores con el estado fenológico del nogal de mayor susceptibilidad a la enfermedad (floración femenina con estigmas receptivos, foto 4), se puede inferir que este año no se habrían producido las condiciones predisponentes para el desarrollo de bacteriosis.

En el gráfico 1 del recuadro de la página 5 puede observarse que en 2013/2014, durante la elongación de amentos (floración masculina) y en la floración femenina, se produjeron varios días con precipitaciones y las temperaturas máximas y mínimas estuvieron dentro del rango en que se activa la bacteria.

Esa temporada, así como también la de 2014/2015, terminó con importantes daños en los montes de nogal.

En tanto, como se observa en el gráfico 2, durante la presente temporada se atrasó considerablemente la floración femenina a la primera semana de noviembre. Aunque el año comenzó con un alto reservorio de inóculo en los montes, aparentemente no se dio la combinación de humedad, precipitaciones y temperatura en el momento de mayor susceptibilidad del nogal.

Si bien hasta el momento no se han observado daños significativos en Valle Medio, se recomienda estar atentos en la próxima temporada, ya que el inóculo está presente. Por tal motivo, se deberán realizar las aplicaciones preventivas teniendo en cuenta la fenología del cultivo (durante la elongación de amentos y la floración femenina) y el pronóstico meteorológico (cuando haya probabilidad de precipitaciones).

Para mayor información dirigirse a la Agencia de Extensión Rural Valle Medio, en la localidad de Luis Beltrán (calle Villa Galense 575), teléfono (02946) 481126, o escribir vía mail a fernandez.diana@inta.gob.ar.

Ing. Agr. Diana Fernández

Agencia de Extensión Rural Valle Medio-INTA Alto Valle


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