“Las mejoras en la productividad siempre van a parar a la acumulación de capital”

Palabra autorizada para describir la realidad económica nacional, no solo por su posición como Diputado Nacional, sino por su extensa trayectoria desde la banca cooperativa. En diálogo con Pulso, dió su parecer acerca de las reformas en marcha y la coyuntura actual.

PREGUNTA: ¿Qué opinión le merece la coyuntura política económica?

RESPUESTA: La coyuntura muestra al gobierno fortalecido luego de las elecciones, haciendo aquello que muchos avisábamos antes de las elecciones que el gobierno iba a hacer. Todas reformas que están a tono con los requerimientos de los inversores que se espera que lleguen. El problema es que siempre falta algo. Primero faltaba pagarle a los holdouts, luego habia que esperar que pase el primer semestre, luego el segundo, luego que pasen las elecciones legislativas. Ahora lo que faltan son las reformas laboral, impositiva y previsional.

P: ¿Acuerda con la necesidad de mejorar la competitividad?

R: Las reformas implican en última instancia reducir el costo laboral de las grandes empresas a fin de maximizar su rentabilidad. Lo explicamos en detalle en el libro “El nuevo modelo económico y sus consecuencias” lanzado recientemente junto a un grupo de economistas. En los países desarrollados durante los últimos 15 años, las mejoras de la productividad por el avance tecnológico entre otras cosas, fue a parar a la mejora de beneficio del capital, como acumulación de las grandes corporaciones. De esa mejora, al salario real no le llegó nada. Nadie puede estar en contra de mejorar los niveles de calidad o producción. Pero si llamamos mejora de la productividad a hacerle perder poder adquisitivo a los trabajadores…

P: ¿No cree que en Argentina el costo laboral es alto?

R: Mire, a las grandes empresas no les interesa el mercado local. Buscan instalarse en aquellos lugares donde pueden producir con menores costos. Una nota de Clarín lo mostró con claridad la semana pasada hablando del desbalance con Brasil en el sector automotriz, que cerrará 2017 con un rojo mayor a los u$s 4.000 millones. El artículo explicaba que el tema a las automotrices les preocupa muy poco, porque son las mismas empresas en ambos países, y deciden en cual les conviene más producir.

P: ¿Qué opina de la reforma previsional?

R: Yo escucho al Presidente decir ‘vamos a cambiar la fórmula de cálculo y nos vamos a ahorrar $100.000 millones por año’, y me horrorizo. Me pregunto si los jubilados se dan cuenta que el Presidente les está avisando que van a ganar menos. Mire qué paradoja: distintos análisis indican que el mayor caudal de votos de Cambiemos proviene de la tercera edad. Justamente el sector que terminará pagando el ajuste.

P: ¿Es sostenible una política anti inflacionaria en base a tasa?

R: La inflación es a la economía lo que la fiebre a las personas. Nadie se enferma de fiebre. La fiebre es un síntoma de otra cosa. Con la inflación sucede lo mismo. Para los economistas ortodoxos, la inflación surge por la excesiva emisión de moneda para financiar los déficit. Algo que no se verifica ni en EEUU ni en Europa, que siguen inyectando miles de millones a la economía, y no tienen inflación. En mi concepción la inflación radica escencialmente en la puja distributiva. Esa pelea se da via precios. Se busca entonces enfriar la economía para que no suban los precios. Si el crédito sale más caro, se consume menos, se invierte menos. Así, se puede llegar a inflación cero. Es algo parecido a la paz de los cementerios.

P: Alguien explicó en estos días, que la tasa de interés actual es la más alta políticamente viable ¿Qué opina?

R: Siempre digo que el límite del ajuste, es la capacidad de resistencia de los ajustados. Si los ‘ajustados’ aguantan, el ajuste no tiene límite. Lo que habrá serán vueltas sucesivas de ajuste.

P: Gradualismo…

R: En efecto. Quien nos habla de gradualismo, lo que nos dice es ‘los voy a ajustar de a poquito…’

P: ¿Por qué cree que no fue viable el modelo anterior?

R: Es un tema para una larga conversación. Hace poco leí al Vice Precidente de Bolivia, García Linera, intentando explicar este fenómeno. Explicaba que las políticas llevadas adelante, que buscaban beneficiar a las capas más débiles de la sociedad, generaron una nueva clase media aspiracional, que comenzó a vivir, demandar y consumir como clase media. Pero al mismo tiempo no hubo una acción política para que toda esa gente entienda que la mejora que había tenido no era producto de una casualidad, sino de políticas públicas que era necesario sostener. Un ejemplo claro es el Impuesto a las Ganancias. Hubo mucha gente que votó disconforme con ese tributo. Y paradigmáticamente, hoy paga más que antes.

Perfil

Carlos Heller

Datos

El economista es oriundo de Entre Rios y tiene 77 años.
Es cooperativista desde el año 1963. Es Presidente del Banco Crediccop desde el año 2005.
En la política, preside el Partido Solidario, y es Diputado Nacional desde el año 2009. Finaliza su mandato el próximo 10 de diciembre.
Fue Vice Presidente del Club Atlético Boca Juniors entre 1985 y 1995.

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