Uso asociativo de plataformas de poda

INTA

EEA ALTO VALLE

Productores frutícolas de la zona de Campo Grande compartieron su experiencia en el uso asociativo de plataformas mecánicas, en el marco de una jornada de intercambio en torno a dicha tecnología, junto a técnicos de INTA de las Agencias de Extensión Rural Centenario, Cipolletti y la EEA Alto Valle.

Las plataformas demuestran que la productividad puede incrementarse como consecuencia directa de las mejores condiciones de trabajo, la disminución de tiempos improductivos para transportar, subir y bajar de la escalera y la disminución de golpes de fruta en cosecha. Por otra parte el uso de las mismas reduce el riesgo de accidentes de trabajo.

La Cooperativa Frutícola Campo Grande adquirió una plataforma mecánica hace dos años, a través de un convenio firmado con la municipalidad de esa localidad, que es utilizada en forma rotativa por 16 productores que poseen en conjunto una 150 hectáreas implantadas de peras y manzanas. Marcelo Asiain, integrante de la organización detalla que con esta tecnología lograron optimizar las jornadas de poda, las tareas de raleo, la colocación de dispenser y el trabajo de cosecha. Por el sistema de uso compartido, la mayor dificultad se presenta en temporada de cosecha. A tal fin diseñaron un protocolo de funcionamiento que establece turnos y rotaciones que garantizan una cobertura mínima de 5 hectáreas por productor.

En cuanto a los costos, que se fijan para las diferentes tareas al inicio de la temporada, el productor citó como ejemplo que la mano de obra para la poda de una hectárea de pera William, implica unos $5.000 frente a unos $8.000 en el sistema tradicional; cada chacarero debe afrontar el pago del personal, el combustible y el mantenimiento de la máquina por el uso en su predio.

El dispositivo es operado por una comparsa de seis personas, cuatro podadores o cosechadores junto al conductor sobre la plataforma y dos operarios más que acompañan caminando.

Respecto al tiempo de tareas culturales, haciendo referencia a la poda, los productores sostienen que mientras en la forma tradicional insume entre 3 y 4 meses, con uso de plataforma se resuelve en dos semanas, “una poda mecánica permite un ahorro del 80% de tiempo” destaca Asiain y resalta la importancia de contar con una disponibilidad de horas extra, para afrontar actividades enmarcadas en procesos de diversificación predial.

La plataforma les posibilita hoy hacer tareas en unas 45 hectáreas ya que no todos los montes tienen diseño en espaldera, no obstante ello, planifican para el invierno hacer ensayos de adecuación de montes tradicionales para evaluar resultados.

Los socios de esta cooperativa, que se ubican en una zona límite con la explotación petrolera, tienen serias dificultades para conseguir mano de obra. Esta plataforma permite que gente que no estaba en el circuito de tareas, como por ejemplo mujeres o adultos con menor desarrollo de destrezas, puedan sumarse, a partir de no tener que trasladar una escalera, con lo cual se ahorra un 40 % de tiempo. “Es una poda más industrial, no tan artesanal, pero en la medida que se pueda acceder a la mecanización, se podrá ayudar a paliar la falta de mano de obra para el sector”, refirió el productor.

Ester González y Gloria Maripán, operarias de la plataforma, detallan entre las ventajas de su uso la utilización de tijeras neumáticas que ahorran esfuerzo manual y el traslado de escaleras por el monte frutal. Afirman que “solo hay que entender su funcionamiento y cuidar sus componentes como las mangueras, el lavado y afilado de las tijeras y en definitiva trabajás más aliviada”.

Dato

“El uso de plataformas revolucionará la estructura social del empleo y mejorará las condiciones de trabajo”.

Carlos Magdalena

Dr. Ingeniero Agrónomo

INTA EEA Alto Valle