Cómo planifica Río Negro el control de las licencias docentes

Educación y la Función Pública ultiman la aplicación de un proceso informatizado de solicitud y de otorgamiento de licencias docentes en Río Negro. Su concreción pretende constituirse en un control por parte del gobierno provincial de la inicial autorización y el posterior desembolso en Educación, considerando que ese ministerio abona de 35 a 40 millones de pesos mensuales por esas ausencias en las áreas educativas.

Casi unos 16.400 docentes
–mayormente por “afecciones comunes” o “atención familiar”– tomaron licencias en el 2015. La programada comprobación se originará con la comunicación del trabajador para su requerimiento.

Su utilización y carencia de fiscalización se reinstaló en la crisis financiera de Río Negro. El mismo gobernador Alberto Weretilneck adelantó la introducción del mecanismo para revisar el número de licencias autorizadas por Educación.

En la medida trabaja ese ministerio y la Función Pública, pero la ejecución dependerá de la cartera de Mónica Silva, previéndose su puesta en marcha para la “primera parte del año”. Enseguida sus técnicos aclaran que todavía no está el equipamiento necesario.

¿En qué consiste ese sistema? Educación advierte rápidamente que no significa ninguna modificación del régimen de licencias (decreto Nº 233/98), aventando cualquier preocupación de fondo de la Unter.

El proyecto consiste en un desarrollo informático, con la creación de un proceso de solicitud y de acceso efectivo a una licencia. El docente se comunicará a un 0800 a un centro de información que recogerá el dato de la imposibilidad de concurrir a la escuela.

Esa comunicación permitirá un registro inmediato y unificado de las ausencias y licencias en el ministerio y, puntualmente, en el área de Liquidación. Así, diariamente, se podrá disponer de la situación escolar, con su seguimiento.

En la actualidad, el docente formaliza esa información a la dirección o secretaría de la Escuela, con lo cual Educación sabe de la situación recién 30 a 40 días después. El nuevo diseño prevé la concentración y la informatización de los pedidos y recién entonces se habilitará la cobertura de la vacante. La cartera educativa explica que se excluirá a las autoridades de la escuela de la tarea y la responsabilidad de la recepción de las licencias, con una forzada visión gremial.

Ese contacto con el centro de registros recibirá la totalidad de información, como además, consultará a los maestros si concurrirán al médico, días de reposo… y, después, se cumplirá con el seguimiento. Este diseño permitirá un “claro registro en Educación”, consciente que su actual ejecución “depende de las voluntades humanas”.

El dato

El sistema consiste en un proceso de disponibilidad de datos, estimándose que estas correcciones permitirán una baja de las licencias abonadas.