Empresarios confiados en que el Centro de Convenciones llegará

Empresarios confiados en que el Centro de Convenciones llegará

Pese al anuncio del gobernador Alberto Weretilneck respecto al descarte del Centro de Convenciones de Bariloche en la primera etapa del Plan Castello, los empresarios del sector turístico se mostraron optimistas.

“Estábamos muy esperanzados en que el proyecto saliera en esta etapa pero confiamos en que más allá de esta postergación, el gobierno provincial lo va a incluir en el presupuesto para el año que viene. Hay que ser optimistas pese a que la noticia no era la esperada”, recalcó el presidente de la Cámara de Turismo de Bariloche, Daniel García.

Sucede que la construcción del Centro de Convenciones es un proyecto que lleva décadas de promesas incumplidas en la ciudad. El gobernador lo incluyó junto al parque productivo y tecnológico, como las obras prometidas para Bariloche en el marco del Plan Castello. Pero el recorte del endeudamiento de 580 a 300 millones de dólares, obligó a Weretilneck a priorizar el parque industrial.

“El Centro de Convenciones de Bariloche todavía no tiene definido el sitio, no está definido qué proyecto es, por lo tanto no es que uno no este priorizándolo. Se prioriza lo que ya está terminado como el parque productivo en el que se está trabajando hace dos años”, argumentó Weretilneck.

El titular de la Asociación Hotelera Gastronómica, Hugo de Barba, recordó que el centro de convenciones también está contemplado en el Plan Patagonia, comprometido por el gobierno nacional. “El gobierno provincial tiene una deuda histórica con Bariloche y sabemos que nos acompañará con el financiamiento y en las gestiones a nivel nacional”, destacó el empresario hotelero.

Los barilochenses tampoco descartaron que el centro conforme la segunda etapa del Plan Castello, una vez que el proyecto esté más avanzado. “La mirada del especialista Arnaldo Nardone generó cambios en el proyecto original. Creíamos, por ejemplo, que la mejor locación era la ruta 82 y él nos señaló que el lugar ideal era la zona del lago y del puerto. Es municipal y por ende, más fácil conseguir la tierra y cambiar el uso”, esbozó García.