Jones Huala: ratifican al juez Villanueva y se acelera el proceso de extradición

El juez federal Gustavo Villanueva fue ratificado al frente del proceso que definirá si Facundo Jones Huala es extraditado a Chile.

La decisión fue tomada por la Cámara Federal de Roca, que rechazó la recusación presentada por el líder mapuche, quien había manifestado un “temor fundado de parcialidad” ante el desempeño del magistrado.

La resolución del tribunal de alzada fue firmada por el camarista Ricardo Barreiro, quien marcó diferencias entre los procesos penales que se tramitan en el Juzgado Federal de Bariloche -subrogado por Villanueva- y el expediente de extradición.

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“El juez Villanueva nada debe decidir sobre la responsabilidad penal de Jones Huala en esta extradición”, afirmó Barreiro luego de recordar que “esta cámara ya tiene asentado criterio sobre la inaplicabilidad, en el procedimiento de extradición, de la regla fijada por el Alto Tribunal en su recordado precedente Llerena”.

“Este proceso, de escasísimo grado de conocimiento, está previsto para establecer de modo fehaciente la identidad de la persona que es solicitada por otro estado y, superado ello, la concurrencia de ciertos recaudos positivos y negativos que en modo alguno importan, para el juez argentino, la posibilidad de expedirse acerca de la existencia del hecho imputado o la culpabilidad del requerido, lo que se encuentra expresamente vedado en el art. 30 de la ley 24.767 que regula la intervención judicial en materia de extradición”, sostiene la resolución difundida hoy por el Poder Judicial de la Nación.

Jones Huala había presentado un escrito a principios de noviembre, en el que sostuvo que “en mi carácter de prisionero político mapuche, solicito la recusación del juez Gustavo Villanueva debido a su falta de parcialidad, enemistad manifiesta con mi persona, el Movimiento Político del que formo parte y el Pueblo Mapuche Organizado”.

Allí remarcó que hasta ahora, “ha rechazado casi todas las pruebas y testigos, tanto jurídico técnicas como políticas. “¿Cómo puedo defenderme si no me aceptan pruebas y testigos? No existen garantías jurídicas ni debido proceso”, indicó.

En su informe elevado a la Cámara Federal, el juez Villanueva afirmó en principio que la recusación resultaba extemporánea, “por haber sido instada luego de vencidos los plazos fijados para ella en el ordenamiento procesal”.

También advirtió que la denuncia formulada en su contra tuvo lugar con posterioridad al inicio de estas actuaciones y por ende no podía ser empleada como causal de recusación.

El camarista Barreiro convalidó ese argumento, destacando que “una de las reglas básicas en la materia es aquella según la cual no es posible fundar una causal de apartamiento en ofensas nacidas con posterioridad a la causa en la que se pretende el apartamiento”.

“Ello así es porque, de lo contrario, bastaría agraviar al magistrado en cualquier forma —denunciarlo penalmente sería una de ellas— para, con esta sencilla operación y sin que importe cuán fundada o infundada fuera esa denuncia, sustraerlo del proceso”, concluyó.

Ahora la Justicia Federal deberá avanzar en el proceso de organización del juicio de extradición, para el que todavía no hay lugar físico confirmado.