La Escuela de Policía se moderniza en Cipolletti

Los alumnos también reciben instrucción en cultura general y en procesos judiciales.

CIPOLLETTI (AC).- Las autoridades la definen como la transformación de la Policía de Río Negro, buscan una fuerza de aproximación y mediación, con modernización de contenido y una formación conforme a la complejidad de la sociedad moderna. En la escuela de suboficiales y agentes de Cipolletti los más de 80 alumnos organizan la dinámica de la institución y se capacitan no sólo en las materias inherentes a la fuerza sino también en conocimientos generales, de la cultura y del funcionamiento de los procesos judiciales. También la describen como la “desmilitarización” de la Policía y los alumnos de la escuela de Cipolletti aseguran que entraron a la institución con una idea y que ese concepto fue mutando con el tiempo. Son estudiantes que tienen entre 20 y 35 años y muchos de ellos se sienten como en un instituto terciario, aunque cumpliendo con la disciplina que exige la capacitación policial. La escuela padeció los efectos del atentando explosivo que el 13 de julio de 2010 terminó con la vida del barrendero municipal José Maciel. La bomba de fabricación casera explotó en la puerta de la institución y destruyó puertas, ventanas y parte de la edificación. A más de dos años de ese trágico episodio, los miembros de la institución proyectaron, diseñaron y pudieron realizar refacciones y arreglos. La escuela luce atractiva, sus paredes fueron pintadas y las escaleras renovadas. Tiene un gimnasio, aulas y hasta una sala de estudios. El director Miguel Hawrylak adelantó a “Río Negro” que continúan realizando obras para ampliar la cocina y la capacidad de alojamiento. Un grupo de estudiantes reside en el edificio de la calle Fernández Oro porque no son de Cipolletti y tampoco tienen la capacidad económica para afrontar el pago de un alquiler. De todos modos, ellos se ocupan del mantenimiento del inmueble ya que la escuela no tiene personal de limpieza, ni cocineras, ni porteros. Los alumnos organizan su jornada y su tiempo para poder limpiar y mantener todo en buenas condiciones. El bedel es el encargado de registrar todas las actividades en un parte diario que después supervisa un oficial de servicio. Durante la mañana realizan actividades físicas y tienen algunas materias, las que corresponden al programa de instrucción policial. Por la tarde reciben capacitaciones sobre conocimientos generales y sobre el sistema judicial. La Policía también firmó convenios con la Universidad Nacional de Río Negro y eso posibilita que los cadetes puedan realizar una tecnicatura en Seguridad Ciudadana o la licenciatura en la misma especialización. Las materias penales son enseñadas por funcionarios de la Cuarta Circunscripción Judicial. “Los alumnos tiene que estar socializados con el funcionamiento del sistema judicial y por eso es importante que adquieran conocimientos específicos, ellos son el brazo de la justicia”, explicó la jueza Alejandra Berenguer que dicta la asignatura en Derecho Penal. Hace un tiempo, los estudiantes comenzaron a asistir a los juicios orales que se realizan en las cámaras criminales de Cipolletti. El objetivo es que conozcan todas las etapas de un proceso penal para que en el futuro se constituyan en eficientes colaboradores. “El agente es el primero en llegar a cualquier hecho policial y debe realizar un radiografía pormenorizada de todo lo que ocurre. Después tiene que aportar esa información durante la instrucción y también en el debate oral, por eso es importante que recuerden el hecho y que aporten detalles sustanciales”, explicaron los funcionarios.

Laura Frank

La jueza Alejandra Berenguer capacita sobre Derecho Penal para lograr futuros “colaboradores eficientes”.


Formá parte de nuestra comunidad de lectores

Más de un siglo comprometidos con nuestra comunidad. Elegí la mejor información, análisis y entretenimiento, desde la Patagonia para todo el país.

Quiero mi suscripción

Comentarios