Los niños neuquinos estuvieron más días en casa que en la escuela

¿Cuántos días de clase hubo este año? La respuesta depende de quien cuente los días en función del interés que representa. Un grupo de padres hizo un minucioso relevamiento para concluir que, al menos este año, hubo 87 días efectivos, si se le descuentan los paros de los docentes y de los auxiliares de servicio y las jornadas sin clase que se contabilizan para llegar a las estadísticas.

En 2010 el Consejo Federal de Educación emitió un resolución que aumentó en diez los 180 mínimos que estableció la ley nacional de educación, es decir 190 días, con lo que este año es el primero en el que hubo más días sin clase que con clase.

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“La única instancia que nos queda es una denuncia ante el Inadi (Instituto Nacional contra la Discriminación, la Xenofobia y el Racismo) porque sería salir de la instancia provincial, en función de la discriminación que sufren nuestros hijos frente a la educación privada y respecto a la consideración de derechos a la educación y a los de los trabajadores”, dijo Enrique Specogna, integrante de la agrupación Padres Autoconvocados por una Educación Digna para Nuestros Hijos.

Es que el grupo había presentado en marzo un reclamo judicial en la Defensoría del Niño, cuando habían pasado 22 días de huelga docente, la resolución llegó a los 32 días cuando el paro se había levantado y decía que derivaba en abstracto porque se había reanudado el dictado de clases. Specogna recordó que también hay una diferencia de trato de Neuquén con respecto a otras provincias. Puso como ejemplo que Buenos Aires registró 18 días de paro con una repercusión de envergadura “y nosotros llevamos 67 días de paro”.

“Si no escolarizo a mi hijo sufro consecuencias punitivas pero si el Estado no da el servicio, la justicia es parcial”.

Enrique Specogna integra la agrupación de padres por la educación.

El paro de ATE que comenzó los primeros días de noviembre originó un adelantamiento del cierre del ciclo lectivo porque al no limpiarse los establecimientos, los directivos no pueden garantizar la salubridad y se suspenden las clases. Ningún director lo acepta en forma pública, pero no son pocos los que cerraron el ciclo la semana pasada cuando, en rigor, deben hacerlo el viernes 22. Los boletines ya están cerrados con la fecha de culminación aunque no pueden retirarlo de las escuelas, pero se permite sacarles una foto con el celular.

La ministra de Educación, Cristina Storioni, reconoció que hay escuelas en las que se tuvo que cerrar los cursos porque los directivos no pudieron sortear la adhesión a la medida de fuerza y focalizó el conflicto en la ciudad de Neuquén. “Las escuelas no han cerrado su ciclo lectivo porque no terminó, el cierre formal del ciclo lectivo es el 20 y en el calendario es el 22 para las actividades administrativas”, recalcó la ministra.

El vocero de los padres indicó que esta situación ocurre desde años previos y que nadie puede hacer nada por desconocimiento o por impericia. “Independiente que es una decisión que toma el directivo del establecimiento, hay una supervisión y una dirección de nivel que miran para otro lado, es una barbaridad, cierran cuando se les da la gana”, contó.

“Concurrimos a la Defensoría del Niño pidieron un nuevo amparo por este paro de ATE y verbalmente nos dijeron que no porque no es efectivo porque nadie hace lo que se debe”, dijo. En ese esquema anotó también el papel del Consejo Provincial de la Niñez, Adolescencia y Familia, Copronaf, que tuvo dos encuentros en los que trató el derecho a la educación pero no se expidió, organismo al que presentaron un pedido hace tres meses.

“Acompañamos en busca de una solución a este extendido conflicto que viola los derechos de los más vulnerables”.

Lara Inda, delegada en Neuquén de la secretaría de Derechos Humanos.

En relación con la identificación que en su momento supo tener el grupo de padres que en la gobernación de Jorge Sobisch enfrentaba al gremio ATEN, explicó que tuvieron que lidiar con ese estigma. Contó que a su juicio lo que ocurre en Neuquén es una puesta en escena de una democracia pero que “en la práctica es un feudo porque todos actúan a lo que dicte el emperador que está sentado en el trono de la gobernación”.

Sostuvo que mientras unos los acusaban de inflar globos y otros de ser del MPN, se mantuvieron al margen porque “no nos interesa porque planteamos un problema grave que sufren nuestros hijos”. Los 190 días de clase fueron establecidos en un documento federal que rubricaron los gobernadores en el 2010 para comprometerse a elevar a 190 días de clase el mínimo de la ley de educación.

El calendario escolar por nivel tiene efectivamente en la cuestión formal los 190 días, pero cuando se hace una disquisición, sólo hay 152 días. Se programa el incumplimiento de la ley en un documento público.

En el calendario, por ejemplo, se toman en cuenta los días de nivelación y de examen en las escuelas secundarias por lo que los alumnos que no se llevan materias a rendir, terminan las clases con anterioridad.