Polemizan por el costo que tendrá el pacto fiscal para Neuquén

“Neuquén no pierde”, sostuvo el director de Rentas.Detalló las alternativas que tienen para equilibrar la baja en la recaudación por el acuerdo con Nación.

Los nuevos topes a Ingresos Brutos acordados en el pacto fiscal firmado por los gobernadores y la Nación le restarán a la provincia unos 500 millones de pesos anuales en recaudación. La cifra equivale a un 4% del total aunque la provincia espera reducirla a un “impacto neutro” modificando la presión sobre los rubros que todavía están por debajo de los máximos.

El director provincial de Rentas, Juan Martín Insúa, explicó los alcances de las modificaciones a los diputados de la comisión de Presupuesto y afirmó que “Neuquén no pierde” como resultado del acuerdo.

El funcionario dijo que no implicará grandes modificaciones impositivas, ya que abarcaría rebajas al esquema de alícuotas de Ingresos Brutos en sólo tres de diez rubros. Para el de construcción, por caso, el proyecto de ley impositiva preveía una alícuota del 3,5% en 2018, mientras que el pacto fiscal le estableció un tope del 3%. En industria manufacturera la previsión era del 3% pero Nación pidió reducirlo al 2%. Ambas actividades deberán quedar exentas del impuesto en el 2022.

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“Si bajáramos esas alícuotas y no subiéramos nada, el costo estaría en el 4% de la recaudación anual”, explicó Insúa, quien aclaró que el total esperado es de alrededor de 12.000 millones de pesos. También valoró que “el sector hidrocarburífero, que pesa un 42% en la recaudación, no se toca”.

El titular de Rentas se refirió a los “márgenes” que tiene la provincia para incrementar alícuotas que aún son bajas en relación a otras jurisdicciones y a lo establecido en el pacto a los efectos de equilibrar esos 500 millones.

El jueves ingresará una nueva propuesta de ley impositiva provincial adecuada a las modificaciones del pacto fiscal, que también debe ser ratificado por los diputados.

Bloques opositores anticiparon cuestionamientos durante la exposición de Insúa y otros lo hicieron en la sesión de ayer. “A algunos nos choca que el gobierno nacional nos diga cómo administrar nuestras cuentas en un país federal”, planteó Mariano Mansilla (Frente Neuquino), quien ironizó: “prendemos velas para que consigan esos 500 millones que van a faltar”. Guillermo Carnaghi (FpV) pidió saber de cuánto sería la pérdida en 2022, a lo que Insúa le indicó que “hay varios escenarios” y prefirió esperar a tener el jueves el proyecto final.

Eduardo Fuentes (Frente Neuquino) evaluó que “desde la administración contable puede ser neutro, pero desde el punto de vista político el impacto es significativo”.

“Si bajáramos esas alícuotas y no subiéramos nada, el costo que generaría el nuevo pacto estaría en el 4% de la recaudación anual”.

Juan Martín Insúa,

director de Rentas

de Neuquén.

“Es injusto, el hilo se corta por

lo más delgado: los jubilados”

Datos

“Si bajáramos esas alícuotas y no subiéramos nada, el costo que generaría el nuevo pacto estaría en el 4% de la recaudación anual”.
Diputados de la oposición utilizaron la sesión de ayer para adelantar su opinión sobre el pacto fiscal y advertir sobre posibles consecuencias.
“Un plan de guerra acordado por los gobernadores”, lo definió Patricia Jure (FIT), mientras que Santiago Nogueira (Libres del Sur) lo calificó como “medidas completamente injustas donde la búsqueda del equilibrio fiscal es cortando el hilo por lo más delgado”, en relación a los haberes jubilatorios.
Eduardo Fuentes (Frente Neuquino) dijo: “es de altísimo riesgo para las provincias” porque implica una quita progresiva de Ingresos Brutos. Añadió que “nuevamente aparecen los jubilados como el objeto de quita”.

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