Proyectan un déficit fiscal de $2.200 millones para todo 2017 en Río Negro

La mejora en la ejecución y gestión presupuestaria observada en estos últimos meses determinó una reducción importante de los desequilibrios fiscales que arrastraba la provincia.

Pese a ello, el déficit de las cuentas públicas proyectado por el gobierno para el cierre del corriente año seguirá siendo elevado, ubicándose en tornos a los 2.200 millones de pesos. La cifra representa una caída de algo más del 30% respecto del 2016 pero duplica la media observada en los últimos cinco años (ver infograma adjunto).

Los últimos datos consignados de este en forma oficial, que están al cierre de septiembre del corriente, dan cuenta de una señal clave para revertir la caótica tendencia del año pasado: un crecimiento de las erogaciones del orden del 28% contra ingresos incrementándose a una tasa del 34%. En la medida que el gasto se ubique por debajo de los recursos, el rojo presupuestario ira reduciéndose en forma progresiva.

Pero este esquema tiene sus limitaciones. Un alto porcentaje del gasto que muestra la provincia es inflexible a la baja. Los más optimistas ponen este índice en el 70%. “Existen todavía muchos sectores donde se puede mejorar la gestión y esto redunda en una disminución directa de costos”, confiaron allegados a las nuevas autoridades de Economía. Los más pesimistas, proyectan que el gasto que ya está consolidado, sin posibilidades de bajar, representa más del 80% de las actuales erogaciones corrientes.

Entre las partidas más inflexibles a la baja se encuentra la de personal que, según el presupuesto vigente (al segundo trimestre de 2017), se llevará este año alrededor de 20.000 millones de pesos, un valor que representa el 70% del total de los gastos de funcionamiento que tiene hoy el Estado rionegrino. Relación que sigue siendo incompatible si se desea buscar en el mediano plazo el equilibrio fiscal de la provincia.

El gobernador Weretilneck hizo mención el pasado lunes a la masa salarial y su impacto en el presupuesto, señalando que la provincia carece de capacidad de respuesta económica para un nuevo aumento.

En este punto el mandatario provincial defendió lo actuado sobre la contención del gasto público y bloqueando la posibilidad de una recomposición salarial en 2017, clausurando hasta marzo las negociaciones con los gremios estatales.

En su último contacto con la prensa, estimó que “estamos terminando mucho mejor que el año pasado” desde el punto de vista financiero. Consideró que en ese contexto “mantuvimos el funcionamiento de los servicios con un esfuerzo en la reducción de gastos. La modificación de la estructura económico financiera del Estado dio resultado porque bajamos el déficit invirtiendo más de 1.500 millones de pesos en obra pública también marca claramente cuáles son las prioridades de la provincia este año”.

“La pauta salarial de 2018 se definirá en base al incremento de recursos. Hay que tener mucho cuidado de no profundizar el déficit”.

Alberto Weretilneck

Gobernador de Río Negro

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