Reclamo sectorial de hoteleros absorbió la audiencia pública por tasas

La variación de aumento no está clara porque depende del impuesto inmobiliario provincial. Piden que no supere la inflación.

Un firme reclamo de empresarios hoteleros para que el aumento en la tasa de Servicios municipales “no se exceda de la inflación” prevista para el próximo año fue el dato saliente de la audiencia pública analizó el proyecto de reforma tributaria que presentó el intendente Gustavo Gennuso, y sería tratada por el Concejo el próximo viernes.

La iniciativa fue defendida por el secretario de Hacienda, Diego Quintana, y no contiene un parámetro claro de incremento para el próximo año porque depende de una variable clave, las actualización de los valores fiscales de los inmuebles, que la provincia todavía no determinó.

Gennuso estuvo ausente en la audiencia y sólo permaneció algunos minutos el jefe de Gabinete, Marcos Barberis.

Entre quienes subieron al estrado a dar su opinión sobresalió la representación hotelera, ya que dos de los tres expositores fueron Hugo de Barba, presidente de la AEHG, y Mario Martino, titular de la filial local de AHT. Las dos cámaras empresarias del sector.

Ambos valoraron que el proyecto inicial del Ejecutivo haya sido modificado para reducir el gasto total previsto para 2018, que en principio iba a aumentar un 38% y finalmente fue recortado a un 19,6%.

También coincidieron en agradecer que haya sido atendido su pedido de bajar el coeficiente de la tasa comercial a los hoteles, que hasta ahora es del 1,5% y en principio iba a subir al 2%. De Barba dijo que aspiraban a más, pero finalmente reconoció como “importante” mantenerlo sin cambios. “El objetivo no debe ser gravar más, sino ampliar la base”, exhortó.

Pidió que se agregue una cláusula por la cual el aumento nominal en la tasa de Servicios no aumente en ningún caso más del 20% (en coincidencia con la inflación), aun si las valuaciones provinciales “crecen un 60%”, como especulan algunos.

Quintana le dijo luego a “Río Negro” que no está previsto satisfacer ese planteo en el texto de la ordenanza, pero sí se podría adoptar luego “por reglamentación”.

En su ponencia destacó que la tasa de Servicios recaudó el año pasado 208 millones de pesos, cuando “el costo total del mantenimiento de calles, plazas, espacios verdes y demás prestaciones municipales cubiertas en el gravamen tuvo un costo de 352 millones”. Insistió en que la tendencia debe ser la equiparación de esos números y subrayó el criterio “progresivo” que pretende aplicar el gobierno.

Martino dijo también, en coincidencia con De Barba, que “la hotelería es un genuino generador de empleo y debe ser cuidado, y no castigado”. Este último volvió a pedir la eliminación de la tasa al turista.

La tercera oradora fue Patricia Ramírez, quien consideró adecuada “la política de estímulos y desestímulos” fijada a través de los coeficientes de las tasas, pero manifestó su preocupación porque no existen desgravaciones para los propietarios “que cuidan el bosque urbano”. Recordó que una medida así debería estar reflejada en la normativa de Bariloche, desde que adhirió a la lucha contra el cambio climático y también fue declarado “municipio sustentable”.


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