San Martín pelea por un nuevo teatro

Un edificio a medio levantar en el corazón del Parque Lineal Pocahullo podría convertirse en Teatro para diciembre de 2018 si prospera la iniciativa de un grupo de artistas locales de reconocida trayectoria. El proyecto depende de una serie de pasos que deben darse antes del 31 de agosto, ya que en esa fecha expira el plazo para acceder a un crédito que permitirá culminar la obra.

En este sentido, el martes pasado se llevó a cabo la primera audiencia pública del año en el Concejo Deliberante de esta ciudad, donde vecinos y miembros de la comunidad cultural debatieron acerca de la conveniencia de ceder el espacio en comodato a la asociación civil que nuclea a 25 de los mayores exponentes culturales de la ciudad.

Allí, los secretarios municipales de Cultura, Marisa Nieto y de Turismo, Esteban Bosch, alentaron la realización del proyecto presentado por los miembros de Arte y Cultura en Patagonia (Arcupa), una asociación civil que lleva realizadas 16 ediciones del Festival Estival de Teatro y numerosas producciones independientes, entre cuyas obras se cuenta “Quiero decir te amo”, la última ganadora de la Fiesta Provincial del Teatro de Neuquén.

Las voces a favor del proyecto fueron sucediéndose entre los participantes de la audiencia pública hasta la locución de la ex concejal y profesora de teatro Emilia Otharán, quien pidió que sea el Ejecutivo municipal el encargado de gestionar y administrar el espacio. Asimismo, solicitó que se convoque a un referéndum para que la ciudadanía se expida sobre el destino del bien público.

La construcción lleva varios años abandonada en la esquina de las calles Coronel Díaz y General Roca, uno de los epicentros de la megaobra que pondrá en valor la ribera del arroyo Pocahullo, con más de 100 millones de pesos de inversión.

Hoy, la eventual futura casa de la cultura sólo consta de cuatro paredes sobre una platea.

El lugar, sin embargo, fue objeto de una encumbrada lucha el año pasado, cuando los miembros del Concejo Deliberante votaron a favor de apropiarse del espacio para mudar allí sus instalaciones. La ordenanza generó grandes movilizaciones para impedirlo, hasta que la intendente Brunilda Rebolledo la vetó.

Sucede que el espacio fue originalmente concebido para albergar expresiones artísticas. En 2010 se proyectó levantar allí una Casa del Bicentenario, pero el flujo de fondos desde el gobierno nacional sólo alcanzó para avanzar la obra hasta en un 30%, tras lo cual quedó abandonada. Aquellos 280.000 pesos girados oportunamente fueron devueltos a Nación por el Municipio a comienzos de la presente gestión.

El financiamiento para completar el 70% del edificio restante depende de una línea de crédito abierta por el Instituto Nacional del Teatro para la construcción de salas independientes, cuya convocatoria vence a fin de mes. La cesión del predio en comodato a Arcupa no garantiza la aprobación del desembolso de los 7 millones de pesos que se estima hacen falta para construir el teatro. Sólo los habilita a presentar el proyecto edilicio en el marco de la convocatoria, junto con la carpeta de antecedentes de trabajo en artes escénicas de mayor volumen en esta ciudad.

La asociación de artistas asegura que sin el crédito del Instituto Nacional del Teatro, no existe otro recurso de financiamiento al que se pueda acceder.

“Si no alcanzamos a presentar el proyecto el 31 de agosto en el INT no podríamos aceptar el comodato del espacio”,

dijo Sandra Monteaguda, miembro de Arte y Cultura en Patagonia.

La inversión

En el 2010 existía un proyecto para construir la Casa del Bicentenario, pero los fondos sólo alcanzaron para ejecutar el 30% de las obras.