Vuelven a allanar el hospital de Allen

Un nuevo allanamiento se llevó adelante ayer por la mañana en el hospital de Allen.

La diligencia judicial está relacionada a la causa que se inició luego de que “Río Negro” publicara una investigación periodística que develó la presunta realización de prácticas abortivas en el nosocomio local y rol de un profesional que presta servicios en ese hospital. Una fiscal secuestró más de 70 historias clínicas que serán puestas bajo la lupa de la Justicia.

El procedimiento, efectuado por el Ministerio Público Fiscal, comenzó a primera hora de la mañana y se extendió hasta luego del mediodía.

La fiscal adjunta Laura Olea, acompañada por personal de la Fiscalía Descentralizada de Allen y por los jefes policiales de la comisaría Sexta, fueron los encargados de realizar el procedimiento. En el edificio de los consultorios externos los funcionarios judiciales tuvieron un arduo trabajo para secuestrar más de 70 historias clínicas que fotocopiaron y certificaron, para luego llevarse los documentos originales de cada paciente.

La directora del hospital, Ana Senesi, negó que las historias clínicas hayan sido manipuladas en los últimos días.

Sin embargo, trascendió que el mismo día que fue publicada la investigación de este diario, el pasado martes 20 por la mañana, dos personas habrían solicitado en el área de Estadística 30 historias clínicas que habrían sido revisadas. “Nunca revisamos las historias clínicas ni las movimos”, aseguró Senesi.

Una pericia sobre la historias clínicas, que se hacen en forma manuscrita, podría servir para conocer si las mismas fueron o no adulteradas con posterioridad a la publicación de la investigación.

El de ayer fue el segundo allanamiento que se concretó en el hospital en una semana.

Durante el primer procedimiento se secuestraron los libros de quirófanos en los que deberían figurar los 71 legrados (raspado de útero) que se practicaron en el hospital durante el ultimo año.

Según explicó Senesi, las historias clínicas que ayer secuestró la fiscal Olea corresponden a pacientes que figuran en los libros de quirófanos que ya están en poder de la Justicia.

“Es lo que tienen que hacer”, señaló la directora sobre el accionar de la Justicia y agregó que en la documentación secuestrada figura por qué se hizo cada uno de los legrados. “Hay legrados que son por biopsias, que se hacen después de un parto o porque hay mucho sangrado. Todo está escrito en la historia clínica y es la única forma de descartar lo de la denuncia en si, que son abortos”, expresó.

Justamente lo que se destacó en la publicación de este diario fue el llamativo número de legrados en el hospital.

El procedimiento, efectuado por el Ministerio Público Fiscal, comenzó a primera hora de la mañana y se extendió hasta el mediodía.