“Te prometo que voy a tratar de mejorar”

Como un consejo de un abuelo a un nieto, Alberto (70 años) le dijo a Sebastián (21): “Quiero que intentes ser mejor. No tengo rencor ni me quiero vengar. No quiero resarcimiento económico, no quiero que estés preso, pero prometeme que no me vas a volver a lastimar”. Hace un año y medio en Regina el muchacho había intentado robarle le billetera y como no pudo, lo golpeó hasta lastimarlo. “Quédese tranquilo, no tenga miedo. Le prometo que voy a intentar ser mejor y no voy a lastimarlo”, le contestó el joven

La conmovedora escena, ocurrida el viernes en los Tribunales de Roca, se completó cuando el hombre mayor le pidió permiso al juez Julio Martínez Vivot, se dirigió hasta donde estaba el joven que había intentado asaltarlo, le dio un estrechón de mano y un fuerte abrazo que conmovió hasta las lágrimas a todos los que estaban en la sala.

El caso avanzó hasta llegar a la instancia de juicio porque no se podía aplicar el criterio de oportunidad.

Tras el encuentro de Alberto y Sebastián, finalmente el fiscal Ricardo Romero aceptó la aplicación del criterio de oportunidad para evitar el juicio y una eventual condena. El muchacho pagará una reparación económica simbólica.

La Defensora Oficial Celia Delgado le había insistido al fiscal Romero sobre la posibilidad de aplicar el criterio de oportunidad, argumentando que Sebastián estaba muy arrepentido, que estaba reordenando su vida, que vivía con su familia, que había conseguido un trabajo en un aserradero.

Pero el representante del Ministerio Público Fiscal le decía que no correspondía porque en el hecho había mediado la violencia.

Hasta que el día de la audiencia Romero accedió a consultarle a la víctima si estaría dispuesto a aceptar un pedido de disculpas.

El fiscal fue hasta la sala donde estaba Alberto y en segundo regresó con un “si” del hombre, pero con algunas condiciones.

Lo único que quería Alberto, un hombre de condición muy humilde, era ingresar a la sala mayor y poder decirle unas palabras al muchacho.

Así fue como unos minutos después, vestido con su impecable traje de saco y corbata, zapatos recién lustrados , y una actitud sumamente comprensiva, le hizo el pedido a Sebastián.

El momento sorprendió y conmovió a todos los presentes, porque apenas el muchacho le tendió la mano como muestra de compromiso para cumplir con lo que le había prometido, el hombre lo tiró hacia su pecho y le dio un abrazo de esos que quedan en la memoria.

Después salieron juntos de la sala y regresaron a Regina. Aunque Alberto no quería, Sebastián deberá resarcirlo economicamente.

El caso

El intento de robo ocurrió en Villa Regina hace un año y medio.

Alberto llegaba al módulo del plan de vivienda en el que reside hace décadas, cuando fue abordado por Sebastián, un muchacho que había visto crecer.

El joven intentó robarle la billetera, pero como no pudo lo golpeó hasta lastimarlo.

Celia Delgado, defensora e integrante de la mesa nacional de la Asociación de Pensamiento Penal

Nos quedamos conmovidos. Nadie intervino, fue un diálogo entre ellos dos. Fue muy emocionante. Alberto pidió hablar con Sebastián. Lo conocía desde chiquito, lo había visto criarse en el barrio”.