Argentina hará los deberes tras la exclusión de las PISA

El ministro de Educación, Esteban Bullrich, adjudicó ayer la exclusión de la Argentina del ranking de las pruebas PISA de 2015 a “fallas graves” cometidas durante el kirchnerismo, pero admitió que “no hubo animosidad” de esa gestión para tratar de modificar el resultado evaluativo y prometió hacer reformas para estar en el próximo estudio.

La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) excluyó a la Argentina del ranking trienial de calidad educativa denominado PISA, porque consideró que fue insuficiente la muestra tomada para garantizar la comparación.

La prueba se tomó en 2015, durante el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner , a estudiantes de 15 años en menos escuelas de las necesarias para garantizar una muestra representativa, según señala el informe difundido ayer.

“Este es el país que no queremos: ser noticia porque no hicimos las cosas bien”, alertó el funcionario, al confirmar la exclusión del ranking.

Bullrich enfatizó que “este se parece más al país que no tenía compromiso con las estadísticas ni con la verdad, el país del Indec, que publicaba una inflación que no era real, y ese es el país que venimos a cambiar”. Sobre esta situación, puntualizó que “hubo fallas técnicas graves, que nos llevan a esta situación de exclusión. Vamos a trabajar para que esto nunca más suceda”.

Sin embargo, el ministro aclaró que “no hubo animosidad, no hubo una específica voluntad de afectar el resultado” sino “un error grave que nos saca del ranking” por “querer enviar una población de 13.280 escuelas, pero de esa población faltaron 3.096 escuelas”.

Adjudicó tal situación a “incompetencia”, al señalar que “hemos hecho toda la investigación, (pero) no hubo animosidad, (ya que) las escuelas no son de una región específica, sino que es generalizado”, para concluir que “está claro que la muestra no es comparable, como dijeron los organismos”.

En el ranking de 2012, Argentina se ubicó en el puesto 59 a nivel mundial y en el sexto lugar en América Latina. En el año 2000, llegó a estar en el puesto 37 del ranking global.

Este año, Singapur obtuvo los mejores resultados. España fue el país hispanoparlante mejor posicionado, seguido por Chile, Uruguay, Costa Rica, Colombia, México, Perú y República Dominicana.

En tanto, el ex ministro de Educación hasta diciembre de 2015, Alberto Sileoni, rechazó las críticas y aseguró que “no hubo manipulación de datos”. Sileoni justificó que la muestra fue menor a la de 2012 porque hubo escuelas que “no existen más”, ya que se fusionaron entre sí en los últimos años. “Mandamos menos escuelas (que en 2012) porque hubo escuelas que ya no existen más. Esa es la explicación que le dimos a PISA”, dijo.

Asia domina la lista

Singapur lideró el estudio PISA 2015, en el que participó más de medio millón de escolares de 15 años de setenta países.

En ciencias naturales se sitúa con 556 puntos por delante de Japón, que atesora 538 puntos, y Estonia, con 534.

En matemáticas, Singapur sigue como líder mundial con 564 puntos, por delante de Hong Kong con 548 puntos y de Macao, con 544.

En comprensión lectora, el país insular supera con 535 puntos a Canadá y Hong Kong, con 527 , así como Finlandia, con 526.

Latinoamérica sigue muy atrás. En México, un 57% mostró conocimientos insuficientes en matemáticas, en ciencias un 48% y en lectura aprobó apenas un 42%.

“No hubo animosidad, no hubo una específica voluntad de afectar el resultado, sino un error grave que nos saca del ranking”.

Ministro de Educación del gobierno de Macri, Esteban Bullrich.

La OCDE de todos modos publicará los datos recogidos en Argentina de forma separada. Chile (44°), Uruguay (48°) y Costa Rica (55°), los mejores en la región.