Califican de “entrega” de los ríos el nuevo texto

Ángel González, presidente de la Asociación por el Libre Acceso a Costas de Ríos y Lagos “Cristian González”, que recuerda a su hijo, el pescador asesinado en 2006 sobre márgenes del Quilquihue, calificó de “vergonzante entrega encubierta” del goce público de los cursos de agua al nuevo límite del camino de sirga dispuesto por la reforma del Código Civil y Comercial, que pasó a ser de 15 metros de despeje contra los históricos 35 que regían hasta el 31 de julio.

Sin embargo, para otros conocedores de la zona como el guía de pesca matrícula provincial “001”, Carlos Trisciuzzi, la nueva determinación no tendrá efectos prácticos para la actividad, por el lamentable hecho de que “tampoco se hacía cumplir antes el límite de los 35 metros…”.

González sostuvo que “con esta reforma, que nosotros cuestionamos en su momento con la presentación de trabajos, incluso constituyéndonos como ‘amigos del tribunal’ en el caso de Lago Escondido, lo que se hace es lisa y llanamente entregar las riberas en propiedad del privado. Porque además –añadió– los 15 metros ni siquiera están establecidos como camino público”.

González dijo que la asociación ambientalista a la que pertenece trabaja en una nueva presentación sobre ese aspecto de la reforma. La Asociación Cristian González lleva el nombre del pescador asesinado por un cuidador de un predio privado cuando pescaba en la costa del río Quilquihue, naciente del lago Lolog, a 12 kilómetros de San Martín de los Andes.

González dijo que uno de los lugares donde seguramente se verán en breve los efectos nocivos del nuevo código será el sector de Playa Bonita del Lolog, donde hay gran cantidad de propietarios ribereños.

Pescadores

La visión del guía de pesca más antiguo de la provincia, con 37 temporadas en la actividad, resulta diferente a la de González, pero porque descree de una normativa que “nunca se controló como debiera”.

Carlos Trisciuzzi recordó que “cuando el camino de sirga era de 35 metros había permanentes problemas con los dueños de campo porque no se controlaba ni se respetaba y ahora el hecho de que sea de 15 metros no cambiará nada, porque seguramente seguirá todo igual; muy lamentablemente…”.

Sin embargo, Trisciuzzi subrayó que esta restricción no afecta del todo a las flotadas de pesca, porque “nosotros –por los guías– ya tenemos nuestras zonas de acampe, nuestras islas, que incluso están previstas en el reglamento debidamente señalizadas con las coordenadas por la provincia. Además –añadió– eventualmente podemos bajar y no nos metemos más de unos metros en el campo para hacer el picnic”.

En cambio, Trisciuzzi consideró acaso más preocupante el hecho de que haya propietarios que eliminan las zonas de acampe.

fernando bravo

fbravo@rionegro.com.ar