Caso Julieta: los estudios detectaron presencia de meningococos

BARILOCHE

BARILOCHE (AB).- La directora del hospital zonal de esta ciudad, Mercedes Ibero, informó ayer que los estudios que hicieron a raíz de la muerte de la egresada Julieta Uriarte confirmaron las sospechas: los resultados arrojaron la presencia de meningococos y neumococos.

Ibero dijo ayer que “eso es lo que dan los estudios que se hicieron”. Cuando se le preguntó si la estudiante sufrió una meningitis, la directora sostuvo que los estudios sólo reflejaron la presencia de meningococos y neumococos. Indicó que la causa de la muerte la determina la autopsia.

Dijo que esas bacterias pueden producir neumonía en una persona. La información judicial sostiene que la chica de 17 años murió por una neumopatía que afectó sus pulmones.

Ibero dijo que cuando ocurrió el deceso de Julieta hubo sospechas por la presencia de meningococo. Por eso, desde el área de epidemiología de salud pública resolvieron medicar preventivamente a las compañeras de la chica y hacer estudios.

Fuentes judiciales informaron ayer que el juez Ricardo Calcagno, a cargo de la causa, no pidió estudios al hospital zonal. Afirmaron que los únicos estudios fueron solicitados al cuerpo médico forense del Poder Judicial de Río Negro.

Julieta murió la tarde del 6 de octubre pasado en una habitación del Hotel Sol Bariloche. La estudiante de quinto año había arribado el 28 de septiembre último a Bariloche, junto con 16 compañeras de quinto año de la Escuela Media 203 de Adolfo Gonzales Chaves, provincia de Buenos Aires, para cumplir el sueño del viaje de egresados. Fuentes judiciales aseguraron que tres coordinadores de la empresa de turismo estudiantil Travel Rock estaban a cargo del grupo. No viajó ningún padre.

La joven comenzó a sentirse mal a los pocos días y consultó varias veces a dos médicos de la empresa Universal Assistance, que contrata Travel Rock para la cobertura médica que debe prestar a los egresados de acuerdo a la normativa vigente.

Sin embargo, no le hicieron ningún estudio ni la trasladaron a un sanatorio. Julieta empeoró y el 6 de octubre murió ante la consternación de sus compañeras, familiares y amigos.

Por el hecho, el fiscal Bernardo Campana imputó a la doctora que atendió las últimas horas a Julieta. Le atribuyó el delito de homicidio culposo porque considera que la médica, cuya identidad no ha trascendido, actuó presuntamente de manera imprudente y negligente en la atención de la egresada.

Los padres de Julieta se constituyeron en querellantes y quieren que se investigue toda la cadena de responsabilidades.