En un mes se sabría de quién son los restos hallados en SAO

Serán enviados a Bariloche para cotejar el ADN que se pueda extraer de los huesos, tarea que se hará en Viedma. En la ciudad cordillerana se analizarán las muestras y serán comparadas con las aportadas por los familiares de Rodrigo Hredil y Walter Calvo.

Un mes demoraría la identificación de los restos óseos hallados durante el fin de semana a 700 metros de la costa, a la altura de la Baliza Camino ubicada sobre la ruta 3.

El dato fue aportado ayer por la Justicia, que presume que el hallazgo de esos fragmentos podría estar ligado a los casos de Rodrigo Hredil o de Walter Calvo, dos jóvenes que se encuentran desaparecidos desde julio de 2015 y agosto de 2009, respectivamente.

Los huesos comenzaron a analizarse ayer en la morgue judicial de Viedma.

Los expertos que se desempeñan allí están determinando qué material genético puede extraerse de ellos. Una vez que ese proceso culmine, y se reúnan los indicios que puedan rescatarse, el producto recuperado será remitido al laboratorio de genética forense de Bariloche.

A la ciudad lacustre se mandarán, además, elementos que deberán aportar familiares directos de Hredil y de Calvo, como muestras de cabello, saliva, etc. Éstas servirán para que los profesionales barilochenses, una vez definido el ADN del producto extraído de los restos, pueda cotejar entre sí esos “perfiles genéticos”, tal como científicamente designan a estas determinaciones.

Recién allí se podrá precisar la identidad de la osamenta encontrada. Entre esos restos, que poseen índices de un importante desgaste producto de la erosión provocada por agentes naturales, figuran huesos de diferentes miembros, aunque no llegan a configurar un esqueleto completo.

La recolección de muestras que deberá aportar cada familia también la realizará la morgue judicial viedmense. Debido a esto, desde la fiscalía presumen que pasarán algunos días hasta que todo el material se recabe para su envío a Bariloche.

El mes que demoraría la determinación de la identidad comenzaría a correr una vez que todo esté allí.

Aunque el lapso de espera parezca largo, debido a la ansiedad por develar a quien pertenecen y a la angustia que esto genera en allegados y amigos de ambos desaparecidos, cabe destacar que esos tiempos se acotaron gracias a la existencia del laboratorio barilochense.

Es que hasta hace muy poco esos estudios se realizaban en La Plata, Buenos Aires, y era muchísimo mayor el tiempo que se tomaban para efectuar las determinaciones genéticas.

Con respecto a los rastrillajes que se venían efectuando en la zona donde se hallaron los huesos, fuentes de la fiscalía confirmaron que ya no será necesario recorrer nuevamente el lugar. Los peritajes hechos tanto el sábado como el domingo fueron considerados suficientes, y se presume que ya no existen indicios que se puedan recabar allí.

Cabe recordar que el hallazgo de los restos ocurrió el sábado alrededor de las 17. Fue el dueño del campo el que, en el marco de un paseo familiar, dio con ellos y avisó a la policía.

Ese día se organizó el primer recorrido por el lugar, y al día siguiente el último, que culminó con el secuestro de nuevos fragmentos óseos y con el de una zapatilla de lona y una gorra con visera.

Una zapatilla y una gorra también fueron encontrados en la
zona, pero se presume que no tienen ligazón alguna con los
huesos hallados
debido, sobre todo, a que parecen muy nuevos.

Datos

Una zapatilla y una gorra también fueron encontrados en la
zona, pero se presume que no tienen ligazón alguna con los
huesos hallados
debido, sobre todo, a que parecen muy nuevos.

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