La joven que se plantó ante el bullying y es soberana de Catriel

No fue un proceso sencillo. Durante mucho tiempo, a Cande el sobrepeso le trajo discriminación. Pero de la experiencia pudo sacar lo mejor. La jovencita de 17 años, nacida y criada en Catriel, se presentó con todas sus dudas y temores a cuestas a un concurso para competir por el reinado de su ciudad. Y triunfó. En el último aniversario de la localidad petrolera, Candela Alejandra Cuevas Nievas, tal como se presenta, fue coronada como nueva soberana.

#Catriel dijo “no” a la discriminación, destacaban ayer las redes sociales, y ella todavía reía. Se emocionaba.

“Creo que es momento de que yo hable… Siempre con respeto y dispuesta a escuchar comentarios buenos y malos. Mi nombre es Candela Alejandra Cuevas Nievas, tengo 17 años de edad, mi principal objetivo al postularme era terminar con mis miedos, con mis “defectos”, con el terror a esta sociedad en la que vivimos. Sufro bullying desde los cinco años por lo tanto sé muy bien lo que es: lo sufrí en jardín, primaria y parte de la secundaria y todo por ser “gorda”, por no ser como las demás”, decidió publicar en su muro de Facebook.

“Recibí mucho apoyo, gente que me llama todo el tiempo, de otros lugares, que me entiende. Y también comentarios malos. Pero no me importa. Llegó un momento en que todo me hacía tan mal que no podía hablar. Nunca pude responder, era introvertida y tenía la autoestima por el suelo. Pero crecí, maduré y empecé a darme cuenta de muchas cosas”, contó ayer a “Río Negro”, firme, sin titubear. La primera: “nunca bajar los brazos”.

Desde los 5 años sintió la “diferencia”, explicó, “todo por unos kilos de más. De todos, de chicos y grandes. Te dicen ‘gorda’, ‘gordita’, cosas peores, y llega un momento que te acostumbrás, pero duele. Sobre todo cuando uno es chico, adolescente, es muy cruel. Me sentía apartada, excluida”, contó Cande, que siempre contó con el apoyo de Rosa y Alberto, sus papás, sus dos hermanas y su hermano.

Cursa el anteúltimo año del CET 21 de Catriel, especializado en energías renovables y ya acaricia el título que la ayudará, piensa hoy, para continuar la carrera de Ingeniería.

Cande dijo que prácticamente a nadie le contó sobre sus ganas de presentarse al concurso municipal, en momentos en que estos certámenes están siendo tan cuestionados. “Lo hice casi en secreto. ¿Qué perseguía? Hacer algo que tenía ganas. Porque averigüé y esto no es un concurso de belleza. Es para elegir una representante de la ciudad, y me interesó aún más cuando me dieron un material de estudio sobre mi ciudad y sus principales actividades. Haber participado fue ya un sueño. Y haber ganado… de verdad no me lo esperaba”, confió la joven.

– ¿Si perdías cómo lo ibas a tomar?

– Bien. Nunca pensé que iba a ganar. Pero de todos modos sentía que la experiencia había valido la pena.

Hoy mi propósito cambió –dice en Facebook–, ya no es solo por mí, es por todas, porque en algún momento todas nos sentimos intimidadas por el que dirán. Para demostrar lo lejos que se puede llegar con el respeto, la educación y la humildad, para romper de una vez por todas con la clasificación, con la preferencia, con la imagen que tienen de “mujer perfecta” porque la perfección no existe, porque somos todas diferentes.

“Siempre he escuchado una frase que dice ‘el cambio empieza por uno mismo’. Yo hoy decido hacer ese cambio”.

“Lamentablemente hay muchas palabras, acciones y gestos que duelen pero sólo nosotros, cada uno de nosotros decide si eso nos va a poner límites”.

Candela Alejandra Cuevas Nievas, nueva soberana de Catriel.

#Catriel dijo “no” a la discriminación, destacaban ayer las redes sociales, y elogiaban el texto que publicó la joven en su página de Facebook.

La joven escribió que lo hizo para romper con la imagen que tienen de “mujer perfecta” porque “la perfección no existe, somos todas diferentes”.