Las mujeres se hacen cargo del transporte en Bariloche

Vanina y Silvia son las dos primeras en hacer recorridos en el servicio público, pero son varias las que están realizando los cursos para sumarse a ese trabajo.

Ya forman parte del plantel. Desde el martes, Vanina Ranquehue y Silvia Berschtl son las primeras mujeres choferes de la empresa MiBus en Bariloche.

Su primer desafío en la firma no es sencillo. A pocos días de una de las más intensas nevadas de las últimas décadas, estas dos mujeres están a cargo de los refuerzos al cerro Catedral.

“Es raro ver dos mujeres en este universo tan masculino”, reconocen risueños los trabajadores del taller del barrio Ñireco.

Vanina tiene 25 años pero reconoce que su papá le enseño a manejar cuando tenía apenas 12 con un Ford Falcon. Luego, llegó una Jeep Gladiator. “Terminé el secundario y como no conseguía trabajo, decidí sacar el carnet profesional. Empecé con turismo estudiantil y después con adultos mayores llevándolos a San Martín de los Andes, El Bolsón y Tronador”, explicó la joven que vive en el barrio Virgen Misionera.

Silvia observa con atención los neumáticos y sube decidida al colectivo. Luce una campera con el logo de la empresa y está delicadamente maquillada. Se acomoda al frente del volante dispuesta a emprender su segunda jornada laboral.

“Es imperdible la cara de sorpresa de la gente al ver una mujer al volante. Cada vuelta es una prueba de manejo. Están atentos a lo que hacés y a lo que dejás de hacer”, reconoció la mujer de 45 años.

Convocatoria por Facebook

A mediados de febrero, la compañía sanjuanina MiBus se hizo cargo de la totalidad del transporte urbano de pasajeros en Bariloche. Luego del debut, lanzaron una convocatoria, a través de su página de Facebook, en busca de mujeres choferes para las unidades.

Unas 18 mujeres ya participaron de las pruebas que continuarán en los próximos días, con más interesadas. Vanina y Silvia resultaron las dos primeras seleccionadas.

“Es bueno esto de poder romper con los estereotipos de que los choferes deben ser hombres. Manejo desde toda la vida y se que puedo hacerlo bien. Siempre le inculqué a mi hija que los cambios están en una misma. De hecho, ella es chica pero está muy atraída por la mecánica”, agregó Silvia.

Cuando les confirmaron su incorporación al plantel, las mujeres arrancaron con un recorrido sólo durante dos horas. El avance es progresivo.

“Nunca imaginé esto pero tomé coraje y decidí presentarme a la prueba de manejo. Pasé y seguí con las prácticas. Las reacciones más lindas son de las mujeres que al subirse al colectivo, me felicitan. Mi viejo, más que orgulloso”, concluyó Vanina.


Formá parte de nuestra comunidad de lectores

Más de un siglo comprometidos con nuestra comunidad. Elegí la mejor información, análisis y entretenimiento, desde la Patagonia para todo el país.

Quiero mi suscripción

Comentarios