Más denuncias por violencia familiar

“Se han dado cuenta que pueden ser feliz, tengan la edad que tengan, desde una niña de 15 años hasta una mujer de 70”, remarcó la jueza de Paz, Gabriela Lapuente, con respecto a los resultados que surgieron a raíz de las campañas sobre violencia de género.

Durante el año pasado, el organismo judicial recibió 1544 denuncias, el 85 por ciento de ellas fue de violencia hacia la mujer, enmarcadas en la ley de Violencia Familiar.

El juzgado de Paz y la red interinstitucional que trabaja en la prevención de violencia, acompañan a la víctima y le brindan los recursos necesarios con el fin de que puedan salir de este flagelo.

La estadística transforma a Cipolletti en la mayor localidad con denuncias realizadas bajo la ley 3040, en la provincia.

Lapuente considera que los números son similares en el resto de las ciudades sin embargo, cree que existen más personas que se animan a denunciar a raíz del trabajo que se realiza “desde hace muchos años” a través de las campañas sociales y de las marchas, como Ni Una Menos, que crearon conciencia sobre denunciar ante una situación de violencia.

En más del 80 por ciento de los casos, la mujer es la víctima de violencia familiar, además de niños, adultos, adultos mayores, entre ellos hombres, que dan a conocer su caso.

Con respecto a esto, Lapuente indicó que se dejó de ver a ese flagelo como algo del ámbito privado, ya que es “una problemática social que tiene que ser tratada como tal”.

El noviazgo adolescente también se ve sacudido por esta problemática, a través de los celos y el control sobre el otro. Son los padres los que dan a conocer la situación a los organismos públicos, y son las instituciones quienes trabajan junto al adolescente para que pueda reconocer lo que sucede. Muchas veces no llegan a verlo pero cuando esto sucede, asegura Lapuente, son ellos quienes deciden emponderarse y tomar las herramientas que les ofrecen para modificar la situación.

“Hay que explicarles que eso no es amor. Se les habla desde el punto de vista de que hay que hay que tratar de modificar ciertas conductas porque eso a largo plazo se va a perpetuar. Hay muchas adolescentes con hijos con noviazgos violentos. Hay que explicarle que sus hijos van a estar aprendiendo eso, y que ese mensaje no es sano ni para ella ni para su hijo. Hay que hablarlos desde la modificación de conductas, de tratar de ayudarla a ella y a la otra parte de la pareja también (…) hay que enseñarle que eso no es amor para que después puedan descubrir el amor”, expresó la jueza de Paz.

Con respecto a las campañas que trabajan fuertemente sobre esta problemática, explicó que ayuda a los jóvenes y también a muchas personas mayores de edad que tienen otras ideas, que vienen de un patriarcado ya establecido. La sensibilización sobre esto, las hace “tomar coraje” para dejar de soportar cosas que vivieron durante años y hasta décadas.

“Se han dado cuenta que siempre uno está tiempo para modificar esa conducta y que pueden llegar a ser feliz tengan la edad que tengan desde una niña de 15 hasta mujer de 70”, remarcó la funcionaria.

La asistencia de grupos interdisciplinarios buscan que los chicos nos reproduzcan

las conductas violentas que a viven en sus familias

Este año ya hay

355 casos

Durante el 2016, el juzgado de Paz recibió 1544 denuncias por violencia familiar.

En lo que va de este año, ya cuentan con 355 expedientes enmarcados en violencia familiar.

La red interinstitucional la componen todos los organismos de salud, de educación, el juzgado de Paz y de Familia, el Consejo Local de la Mujer, Desarrollo Social de la provincia, y Desarrollo Humano y de Familia, de Cipolletti, entre otros organismos.

Desde el juzgado de Paz creen que no sólo debe ser fortalecida la víctima de violencia sino que se le debe brindar tratamiento al agresor, a través de psicólogos o visitas sociales.