Tras las heladas, tres chacareros cuentan como se preparan para la próxima cosecha

No se resignan a abandonar sus chacras. Se tecnificaron para estar mejor cubiertos. Historias de esfuerzo, sacrificios y esperanza.

No todos bajan los brazos. La crisis de la fruticultura expulsó en esta última década a miles de productores. Retraso cambiario, precios finales de la fruta en caída libre, falta de inversiones y costos financieros imposibles de enfrentar fueron sólo algunos de los frentes de tormenta que tuvieron que soportar los productores en todo este último tiempo.

Pero muchos son los chacareros de Río Colorado que quieren seguir trabajando y produciendo en sus chacras, pese a los duros golpes económicos y del clima, que dejaron pérdidas millonarias y casi nada de fruta de la mano de las frías heladas primaverales y el granizo del cálido verano.

Los retornos que reciben los chacareros por su fruta no entusiasman. Sin embargo, los productores frutícolas, conocedores de buenos y malos ciclos, no ceden ante la adversidad y con esfuerzos continúan invirtiendo en equipamientos y recursos tecnológicos para defender las próximas cosechas.

En un contexto complicado existen más de una decena de propietarios de chacras que no se resignaron, concretando importantes inversiones.

Trabajan contra reloj para culminar con las instalaciones de las defensas contra heladas antes del inicio de la temporada.

“Río Negro” visitó a varios productores de la zona, quienes reflexionaron y aseguraron, con un alto grado de optimismo, que si salvan la cosecha que viene podrán afrontar las deudas contraídas por las inversiones y se seguirán apostando en ampliar las coberturas para su fruta.

Lograr estos objetivos no es para nada sencillo. Por la falta de presencia del Estado (especialmente en créditos) los chacareros tuvieron que desprenderse de algunos de sus bienes personales. Hacerse del dinero para las inversiones no fue cosa sencilla. Con la venta de vehículos, motos y otros que adquirieron préstamos personales, accedieron al financiamiento del sistema productivo y comercial de la actividad. El amor por la tierra define este tipo de conductas.

Tras dos años muy duros, Pedro Fernández instaló un equipo para proteger en esta próxima temporada una hectárea de fruta de carozo. “Me costó mucho. Porque llevo años de mucha malaria, sin rentabilidad. Pero era esto, hacer un nuevo esfuerzo, o cerrar las tranqueras para abandonar la chacra, lugar donde viví toda la vida. Ésta es la última oportunidad que tengo, afirma. Si puedo salvar la fruta de carozo podré afrontar los compromisos, pero si falla no sé cómo podré seguir”, reflexionó mientras recorría la chacra mostrando su obra de ingeniería.

Otra muestra del esfuerzo para sostener productivas las tierras es la de Roberto Mellado que se desprendió de vehículos para con ese dinero cubrir parte de la inversión inicial de los equipamientos que defenderán cuatro hectáreas de fruta de carozo. “Los números son tremendamente altos y todo sale del sacrificio de cada chacarero. Vamos a hacer un nuevo esfuerzo para proteger la cosecha. Acá no hay ayuda de ningún gobierno. Pero sí a los funcionarios les interesa cobrar los impuestos”, exclama. “Yo con mis manos y junto a mi familia pusimos estas plantas y no las podemos abandonar. Mientras tenga fuerza voy a seguir agachando la cabeza, poniendo el hombro para continuar. Tenemos expectativas de que esto algún día va a cambiar, y ese momento nos tiene que agarrar bien preparados”, señaló con orgullo al ser consultado por el tema.

Sin dejar las tareas Gabino y Alexis Sanhueza (padre e hijo) comentaron: “Sabíamos que no teníamos otra. Buscamos al ingeniero Julio Klink, que nos hizo todo el estudio y el proyecto para las siete hectáreas que estaban en buenas condiciones. Después juntamos todo el ahorro que teníamos y fuimos a Bahía Blanca donde compramos todos los materiales para ahorrar dinero en la mano de obra. Nosotros mismos nos pusimos a armar toda la estructura para el riego por aspersión. Esperamos terminar antes que comiencen las heladas fuertes. Tenemos todas las esperanzas puestas en salvar la cosecha este año y de esa forma podemos recuperar la inversión”, comentó Gabino.

No bajar los brazos, esa es la consigna de todos aquellos que luchan en forma desigual con las arbitrariedades de la economía y el tiempo.

En la misma línea que los entrevistados, Víctor Pardo, presidente de la Cámara de Productores, señaló que “tenemos que valorar el esfuerzo que están haciendo muchos chacareros con limitaciones financieras. Se siguen arriesgando para continuar en la actividad. Las heladas tardías llegarán para quedarse en esta zona y está demostrado que las defensas hechas en los últimos dos años fueron insuficientes, y este método no es infalible, pero ha tenido mejores resultados que otros.”

La inversión por cada hectárea de fruta de carozo cubierta con riego por aspersión demandó un promedio de unos 14.000 dólares, solamente en la parte de equipamiento, valor al que hay que agregarle 21% por el pago de IVA. Las cifras son enormes teniendo en cuenta la escala de fondos que manejan los productores entrevistados.

La apuesta sin dudas es riesgosa, pero los productores son conscientes de que no hay otra forma para salir adelante en esta coyuntura.

“Nosotros armamos toda la estructura para el riego por aspersión. Esperamos terminar antes que comiencen las heladas fuertes”.

Gabino Sanhueza, productor.

“Los números por hectáreas para el riego por aspersión son tremendamente altos y todo sale del sacrificio de cada chacarero”.

Roberto Mellado,

productor.

“Me costó mucho. Llevo años sin rentabilidad. Pero era esto, hacer un nuevo esfuerzo o cerrar las tranqueras”.

Pedro Fernández,

productor

En este contexto complicado, existen más de una decena de propietarios de chacras que no se resignan a ceder frente a la crisis.

Créditos subsidiados para la fruticultura

Durante años la ausencia de créditos fue una constante en la fruticultura.

Sin embargo, semanas atrás desde el gobierno nacional anunciaron que las pymes del Alto Valle que integren la cadena frutícola (productores y empresas) pueden financiar sus inversiones con la nueva línea de crédito del Banco de Inversión y Comercio Exterior (BICE) que otorga un plazo máximo de siete años y hasta dos de gracia. Los préstamos, señala la entidad, tienen como destino el financiamiento de instalaciones de riego, malla antigranizo, nuevas líneas de empaque y frío, compra de maquinaria, plantaciones y reconversión de variedades.

“Los créditos que lanzamos fueron pensados para promover el crecimiento de un sector estratégico para el desarrollo de la región. El financiamiento de largo plazo que diseñamos es clave para que los empresarios y productores puedan trabajar en proyectos que requieren planificación a futuro, como por ejemplo la reconversión tecnológica y de variedades”, indicó el presidente del BICE, Pablo García.

Con respecto a los montos, el comunicado oficial destaca que la línea crediticia establece un máximo de $ 50 millones por proyecto radicado en las provincias de Neuquén y Río Negro. La tasa de interés es variable (Badlar Bancos Privados más un margen de 450 puntos básicos) con un tope máximo del 18%, impidiendo que supere dicho límite.

Para los productores, este tipo de préstamo está orientado especialmente a las empresas del sector por los requisitos que tiene. Salen también a sólo semanas de las elecciones.

14.000

18%

leelo en www.rionegro.com.ar

Datos

“Nosotros armamos toda la estructura para el riego por aspersión. Esperamos terminar antes que comiencen las heladas fuertes”.
“Los números por hectáreas para el riego por aspersión son tremendamente altos y todo sale del sacrificio de cada chacarero”.
“Me costó mucho. Llevo años sin rentabilidad. Pero era esto, hacer un nuevo esfuerzo o cerrar las tranqueras”.
En este contexto complicado, existen más de una decena de propietarios de chacras que no se resignan a ceder frente a la crisis.
son los dólares promedio por hectárea que se necesitan para adquirir infraestructura de control de heladas.
fue lo que cayó la superficie en producción de pomáceas en las últimas nueve temporadas en la localidad de Río Colorado.
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