Cruces judiciales en la causa del padre que golpeó a su hija

Cruce judicial entre fiscales y jueces tras un fallo. El rechazo del acuerdo alcanzado entre las partes en la causa del padre imputado por golpear a su hija de apenas cinco meses generó duros planteos judiciales.

El fiscal Juan Pedro Puntel pidió ayer al juez de Garantías, Adrián Dvorzak, que anule lo resuelto por el Tribunal integrado por los jueces Marcelo Chironi, Ignacio Gandolfi y Martín Brussino Kain que declaró inadmisible la pena de tres años y seis meses de prisión efectiva acordada en el marco de un juicio abreviado a Isaías Contreras por los delitos de “lesiones graves y lesiones leves agravadas por el vínculo, amenazas coactivas agravadas por el empleo de arma y desobediencia judicial”. Como graves fueron calificadas las lesiones provocadas por los golpes de puño propinados en la cabeza de la recién nacida y las leves por una agresión anterior con una zapatilla.

Para los tres jueces ese monto de pena acordado fue exiguo y desproporcionado y como “magistrados no podemos actuar como si nada sucediera. Los hechos atribuidos al causante tienen ribetes graves y los términos del acuerdo al que arribaron las partes, no parece responder en forma integral a la culpabilidad que por los hechos específicos es dable atribuir al imputado”.

También la Defensora Oficial, Graciela Carriqueo, en representación del imputado reaccionó contra ese fallo y planteó la impugnación ante el juez Dvorzak. El fiscal Puntel pidió la nulidad, fundamentando lo establecido por el artículo 191 del actual Código Procesal Penal de Río Negro que en su segundo párrafo establece textualmente: “la sentencia condenatoria fijará con precisión las penas que correspondan, no pudiendo el tribunal aplicar penas más graves que las requeridas por los acusadores, y deberán absolver cuando las partes así lo requieran”. En este marco, Puntel sostuvo que “aunque los jueces tengan el mejor fundamento moral y técnico para justificar su apartamiento de la pena acordada sin controversia entre las partes, sencillamente no pueden emitir tal opinión y fundar en ella la inadmisibilidad del acuerdo porque esta tarea no es la de un juez”. El fiscal hizo también referencia a la presión social ante casos como el investigado.

En la audiencia de ayer convocada para control de acusación de esta causa en la que un padre de 20 años permanece con prisión preventiva por golpear a su beba, el juez Dvorzak sólo recibió los planteos de Puntel y la defensora oficial. Tras un cuarto intermedio dispuso que ambas presentaciones serán resueltos por un juez de Impugnación que como -hasta el momento- ninguno ha sido designado en Viedma deberá intervenir un magistrado de otra circunscripción judicial.