Prometen apoyo para el patinador Juan Salvo

Prometen apoyo para el patinador Juan Salvo

El joven viedmense Juan Salvo está considerado como uno de los mejores exponentes del país en el patín artístico, con gran cantidad de medallas y una cómoda posición en el escalafón sudamericano. Sin embargo, debe pelear fuera de la pista por dinero suficiente que lo pueda colocar en el Mundial de China en agosto próximo, y su madre está a punto de vender su auto.

Este requerimiento debe cobrar la suficiente fuerza ya que instalarse en el país asiático cuesta 4.300 dólares que la Confederación Argentina de Patín no tiene para el financiamiento.

Además, de asistir hay que tomar en cuenta que contribuiría mucho en una buena rutina, otras botas de alta competencia con un valor de 5.000 pesos de cada una de las cuatro ruedas.

Por tratarse de una disciplina de organización individual, sin demasiado respaldo institucional su familia está haciendo lo imposible como para estar presente allí entre el 26 y 31 de ese mes.

Su madre, Andrea Decilio le colocó una botella de color amarillo a su Twingo para costear esa representación. Por las mismas flaquezas económicas, su hijo tuvo que bajarse del avión aun cuanto estuvo designado en dos oportunidades anteriores. “Esta vez haré todo lo posible, y si hay que limpiar baños, lo voy a hacer”, apunta a DeViedma.

El joven deportista proviene de la escuela municipal del gimnasio Fioravanti Ruggeri, donde se inició a los 10 años.

Andrea destacó que luego de sus ruegos públicos -por tratarse de una representación de la ciudad, la Provincia y el país; le anunciaron ayuda desde la Lotería de Río Negro y la Legislatura rionegrina a fin de afrontar la campaña competitiva.

Esta disciplina cuenta con perfil bajo y, a su vez, fragilidad en cuanto al financiamiento en virtud de que no cuenta con reconocimiento olímpico. De hecho, el pequeño equipo integrado por Juan, su madre y su entrenadora Gina De Mattía; tendrá que afrontar otro pequeño drama.

Es que el joven está designado para competir en forma individual, y en pareja junto con la bahiense Valentina Saldías. Está jovencita corre el riesgo de que su oportunidad quede trunca al no tener el dinero para viajar.

En estos años de esfuerzo propio, Salvo tomó una consigna para conseguir mejor punto para los competidores externos: “la cantidad de piedras que estorben mi camino hoy, será equivalente al castillo que construiré mañana”.

El mundo del patín se presenta como duro aun cuando hay otros países sudamericanos que otorgan más apoyo a este deporte. En los últimos dos sudamericanos “estuve a punto de regalarle las medallas a un chileno y a un colombiano, porque volvían a sus países sin la presea dorada, y corrían el riesgo de perder la beca otorgada por su propio país”; contó a DeViedma.

Salvo lleva ganadas cuatro medallas de oro, tres de plata y tres de bronce a nivel sudamericano, y pese a contar con sólo 15 años.