Trasladaron a Buenos Aires al adolescente herido en el incendio

Sufrió lesiones en la tráquea y las vías aéreas por la inhalación de humo y aire caliente durante el incendio de una casilla en la Toma Unión.

El adolescente que resultó herido en el incendio del martes por la mañana cuando la casilla que habitaba se transformó en un trampa de fuego, fue trasladado cerca de las 18 en vuelo sanitario al Hospital Garrahan de Capital Federal. Por su parte, su hermanita de cuatro años, permanece en terapia intensiva en el Hospital Zatti con quemaduras en un 18 por ciento de su cuerpo que se circunscriben fundamentalmente a su cara y sus brazos.

El joven, en cambio, tenía más del 35 por ciento afectado y la mayor preocupación radica en que se observaron lesiones en la tráquea y las vías aéreas por la inhalación de humo y aire caliente durante el siniestro, según explicó a DeViedma el director del nosocomio, José Robacio .

La causa del incendio, que se suscitó cerca de las 10 de la mañana, pudo haber sido una salamandra que permanecía encendida aún después de que los bomberos actuaran y sofocaran las llamas que destruyeron la totalidad de la precaria vivienda de madera, nailon y chapa.

Ambos chicos se encontraban en el interior mientras cuatro hermanitos habían concurrido a la escuela. Su madre, según trascendió en el lugar del hecho, había salido pocos minutos antes y su padre trabajaba.

Testigos ocasionales observaron humo saliendo de la pequeña vivienda, situada en el barrio Unión, una ocupación creada años atrás en cercanías del Inalauquen.

La casualidad llevó a que el suspendido juez penal -cuyo jury comenzará en los próximos días- Favio Igoldi fuera uno de los primeros en llegar al sitio.

Según relató iba a dar clases al Penal cuando vio mucho humo que salía de la casilla. Se acercó para ver si había gente adentro junto con un par de policías de civil que hicieron lo mismo.

Mientras observaba desde el patio apareció el chico en el medio del humo. El magistrado lo tomó y lo alejó del lugar y allí el muchacho le dijo que estaba una hermanita. Fue entonces que todos corrieron a la casa para romper vidrio de la ventana y buscar a la nena.

La chiquita se asomó y uno de los policías la sacó cuando la casa ya ardía. Cundió la angustia porque los vecinos afirmaban que eran más hermanitos. Pero luego se corroboró que afortunadamente no había nadie más.

Doloroso antecedente

El caso recordó la tragedia del Loteo Silva, cuando el 15 de junio de 2008, dos pequeños murieron al incendiarse la pequeña casilla en la que vivían. Ropa que se secaba sobre una cocina habría originado las llamas que calcinaron todo el lugar. La mamá había cruzado a comprar algo para almorzar a un almacén cercano. Al volver se encontró con el desastre.


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